El líder de la Contraloría Ciudadana Independiente, Jorge Carlos Ruiz, lamentó el descontrol que impera todavía en hogares del estado.
Señaló que personal de espacios como el Hogar Cabañas o el de Cien Corazones no tiene lo mínimo necesario para atender a menores.
Manifestó que la Secretaría de Asistencia Social en la entidad debe hacer movimientos urgentes, pues las cabezas de estos institutos han demostrado no servir para el cargo.
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Aseguró que parte del problema tiene que ver con la "presión" que se ejerce a los funcionarios para que no hagan lo que marca la ley.
"Los directores de estos centros tienen que cumplir a cabalidad que las personas que están dentro de estos institutos tengan un mínimo, una preparación para atender a los menores. O sea, dadas las circunstancias y por la muerte del menor Víctor, pues se sabe que pudo haber sido una mala contención. No tienen lo mínimo necesario para atender a estos menores".
Dijo que también como prueba está el que dieran de baja a Christian Aguayo Orozco, ex director jurídico del Hogar Cabañas; o la reciente renuncia de Tanya Tanury Lysceth Aguiñaga Carrum al frente de Cien Corazones.
Aunque autoridades informaron que esta última renuncia se dio por motivos personales, Ruiz Romero negó que haya sido así, pues de acuerdo a "informantes" dentro de la institución, lo que impera dentro del hogar es un "conflicto muy grave", de ahí su insistencia porque hace falta preparación en la gente que llega a estos espacios.
"Hay que saber que tienen un presupuesto, tanto el DIF como el mismo Hogar Cabañas donde tienen todos los elementos para hacer lo que corresponde con los menores. Falta preparación por parte de los monitores y cuidadores de estos centros. Y nosotros ya lo habíamos señalado, cuando entra esta administración salen muchas personas que ya tenían muchos años de experiencia y entran nuevos elementos sin ninguna preparación", añadió.