Enormes retos abren la aparición sorpresiva de la pandemia, a la educación a distancia que enfrenta una nueva realidad “que tenemos que aprender a ver con lentes diferentes y que hace ocho meses no existía”, precisó el responsable del gabinete de la asesoría educativa de la fundación Qatar para la Educación, Ciencia y Desarrollo Universitario, doctor Francisco Marmolejo Cervantes.
Dentro de la Feria Internacional del Libro inició este lunes el Encuentro Internacional de Educación a Distancia -donde fue acompañado por la rectora de la Universidad Virtual, María Esther Avelar Álvarez- y uno de los temas a discutir fue precisamente el escenario que ha enfrentado a partir de la pandemia, donde destacó que incluso al principio fue complicado y pocas naciones pudieron responder rápidamente a los estudiantes.
El Rector de la Universidad de Guadalajara, Ricardo Villanueva Lomelí, fue el encargado de inaugurar este foro virtual y destacó su título: “Virtualizar, para Transformar; miradas y voces ante la emergencia educativa”; “nos invita a compartir experiencias sobre las iniciativas que promovidas para hacer frente a los desafíos que nos impuso la emergencia sanitaria en el ámbito de la educación, así como explorar escenarios posibles para el futuro”.
Fue enfático al señalar que la pandemia demostró que si bien había avances en la educación virtual, “no todas las instituciones estábamos preparadas para ello, y la migración de la educación a plataformas digitales no es ni será sencillo”. Hay muchos desafíos en los que aún falta resolución y terminó diciendo que después de la pandemia “en la Universidad de Guadalajara nos queda claro que ya no volverá a ser la misma universidad, regresaremos de este confinamiento siendo mejores; las universidades tenemos ese reto de buscar áreas de oportunidades y ver hacia el futuro, con los aprendizajes que hemos vivido”.
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Francisco Marmolejo puso como ejemplo a Qatar como el país que a los dos días ya había cambiado su sistema educativo de presencial a virtual, “en Estados Unidos tardaron dos semanas y en México se hizo un gran esfuerzo, principalmente por las universidades”, comentó.
Marmolejo Cervantes enfatizó en que si algo vino a demostrar la pandemia es que el Internet no ha alcanzado a todos, ya que solo el 5% de los estudiantes pobres tienen acceso a una computadora y que por lo tanto la educación en línea ha resultado dispareja y no ha beneficiado a todos.
Comentó que también demostró que se puede enseñar bien por ese medio, pero no necesariamente se aprende bien. Y los maestros se han tenido que convertir en personajes multitareas.
Otro de los impactos del momento -y así se demuestra en el buscador de Google- es que abundó la búsqueda de información sobre cursos en línea y en cambio casi desapareció la información sobre estudios en el extranjero y la internacionalización. Las universidades no saben cuándo van a volver a la nueva normalidad.
De ahí pues que recomendó que es necesario y urgente minimizar la brecha tecnológica y que las universidades se preparen para una nueva normalidad.
