Paciencia, es la palabra clave para llevar de la mejor manera la educación desde casa, pues aunque cada hogar tiene condiciones distintas, con las clases a distancia todos enfrentaron dificultades.
Gerardo García fue uno de ellos. Él es abuelo de tres pequeños, un niño que inició preescolar, otro de tercer grado de primaria y una pequeña de cuarto de primaria y estará apoyándolos con las clases en línea y a través de televisión e internet.
El hombre, psicólogo de profesión, recientemente se lesionó la pierna y su incapacidad temporal lo mantiene en casa, a donde todas las mañanas le llevan a sus tres nietos y enfrentó una serie de problemas.
Primero se dio cuenta que una de las clases transmitidas por televisión se empalmaban entre el niño de tercer grado y su prima de cuarto de primaria y después le avisaron que la maestra del pequeño de preescolar quería interactuar con el niño, pero en un espacio aislado, para evitar interrupciones, “pero a mí no se me hace que pueda hacer esa parte, porque es complicado, a los niños les estamos enseñando a socializar”, dijo el hombre.
“Todo es muy novedoso para ellos, porque además están distraídos, aunque uno les estuvo haciendo consciencia de que iban a regresar a clases, no en el salón, pero que tenían que seguir las actividades que se iban a dar en la casa y los maestros iban a ser los papás o abuelos, entre que quieren aceptarlo, también se cansan”, explicó Gerardo.
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Consideró que lo ideal habría sido una asesoría previa, tanto para niños, como para las personas que se encargarán del acompañamiento desde casa, que muchas veces, desconocen elementos básicos para el aprendizaje o carecen de herramientas para alcanzar los objetivos.
“Si a nosotros teniendo estudios la paciencia es la que nos gana, pienso que debió haber un previo para enseñar a los padres de familia o los tutores que se iban a encargar, pero nada más dijeron cómo se va a trabajar y avientan toda la información y no dan tiempo de reacción, sin ver si realmente todos los niños van a estar con alguien responsable”.
Como psicólogo y abuelo que por la pandemia le tocó encargarse de la formación de sus nietos mientras las clases son en casa para prevenir contagios de Covid-19, su recomendación es “hacerles ver la razón por la que se está haciendo en casa, no nada más decirles que no se puede ir a la escuela, sino explicarles la causa”.
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