En una mañana fría, la ciudad se convirtió en un desierto navideño porque las calles, avenidas, plazas y parques lucen vacíos contrario al 2019.
El 25 de diciembre de años anteriores, aunque la Zona Metropolitana de Guadalajara lucia vacía, las niñas y niños salían a la vialidad a presumir sus juguetes nuevos.
Los vehículos se volvían carritos, las motocicletas pasaban a ser bicicletas o motos eléctricas, hoy la pandemia por el Covid-19 dejó que las sonrisas y ojos brillantes jugarán en un rincón de su casa.
En algunos casos no recibieron el abrazo de mamá ni de papá porque enfermaron, mientras que eso pasa en las casas, la soledad de las calles extrañan a los más pequeños de la ciudad.
Por las avenidas de la ciudad de Los Niños, Zapopan sólo se escucha una que otra patrulla con las sirenas encendidas, y en sus parques el cantar de los aves, que se guardan como las familias en su maravilloso nido.
En un recorrido realizado por Periférico Norte, Parres Arias, Ávila Camacho y por calles aledañas se pudo observar el vacío vial y de las personas.
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