/ domingo 28 de junio de 2020

Aumenta cumplimiento de protocolos en tianguis El Baratillo

Este domingo autoridades municipales dieron luz verde a comerciantes a instalarse

Aunque se vio una mejora en la aplicación y cumplimiento de protocolos de sanidad en El Baratillo, de nuevo no todos los comerciantes ni mucho menos los clientes respetaron medidas básicas como el uso del cubrebocas o la sana distancia de cara a la pandemia.

Este domingo autoridades municipales dieron luz verde a comerciantes del tianguis El Baratillo a instalarse, bajo la promesa de apegarse estrictamente a los protocolos de sanidad, toda vez que la semana anterior los suspendieron precisamente por desacatar estas medidas.

Si bien se vieron a más comerciantes con cubrebocas, todavía persistió otro gran número de quienes no lo usaron bien -o no se lo colocaron-, ni se vio una disminución tampoco en el número de visitantes al lugar.

Chécalo:

A pesar de que en cada cuadra se observaron los cercos para regular el ingreso de clientes, al menos para las 2 de la tarde no se vio a ningún integrante de la administración tapatía repartiendo gel o tomando la temperatura en los ingresos, como en domingos anteriores se vio.

En varias zonas se vieron carteles o señaléticas en donde se invitaba a la ciudadanía a portar el cubrebocas y acatar las demás medidas de sanidad, en un afán de permitir que la reactivación económica del lugar se haga de la mejor manera.

Sin embargo, por bloques o cuadras, se vio que algunos comerciantes se organizaron más que otros, y es que, mientras en unos -además de las barreras de ingreso- se colocó contención en las esquinas para evitar que los visitantes se metieran al tianguis por las banquetas, otros más hasta colocaron tapetes sanitizantes.

En el caso de tramo de Juan R. Zavala, entre Industria y Federación, la mayoría de comerciantes traía el cubrebocas mientras que el resto -solo unos cuantos- lo traían mal colocados.

Con una dinámica diferenciada, este domingo así se vivió El Baratillo, cuyos comerciantes se comprometieron a cumplir cabalmente los protocolos. No obstante, será en los siguientes días en que autoridades de Guadalajara anuncien si El Baratillo, así como el tianguis de Polanco -que también abrió sus puertas- podrán instalarse la siguiente semana.


Aunque se vio una mejora en la aplicación y cumplimiento de protocolos de sanidad en El Baratillo, de nuevo no todos los comerciantes ni mucho menos los clientes respetaron medidas básicas como el uso del cubrebocas o la sana distancia de cara a la pandemia.

Este domingo autoridades municipales dieron luz verde a comerciantes del tianguis El Baratillo a instalarse, bajo la promesa de apegarse estrictamente a los protocolos de sanidad, toda vez que la semana anterior los suspendieron precisamente por desacatar estas medidas.

Si bien se vieron a más comerciantes con cubrebocas, todavía persistió otro gran número de quienes no lo usaron bien -o no se lo colocaron-, ni se vio una disminución tampoco en el número de visitantes al lugar.

Chécalo:

A pesar de que en cada cuadra se observaron los cercos para regular el ingreso de clientes, al menos para las 2 de la tarde no se vio a ningún integrante de la administración tapatía repartiendo gel o tomando la temperatura en los ingresos, como en domingos anteriores se vio.

En varias zonas se vieron carteles o señaléticas en donde se invitaba a la ciudadanía a portar el cubrebocas y acatar las demás medidas de sanidad, en un afán de permitir que la reactivación económica del lugar se haga de la mejor manera.

Sin embargo, por bloques o cuadras, se vio que algunos comerciantes se organizaron más que otros, y es que, mientras en unos -además de las barreras de ingreso- se colocó contención en las esquinas para evitar que los visitantes se metieran al tianguis por las banquetas, otros más hasta colocaron tapetes sanitizantes.

En el caso de tramo de Juan R. Zavala, entre Industria y Federación, la mayoría de comerciantes traía el cubrebocas mientras que el resto -solo unos cuantos- lo traían mal colocados.

Con una dinámica diferenciada, este domingo así se vivió El Baratillo, cuyos comerciantes se comprometieron a cumplir cabalmente los protocolos. No obstante, será en los siguientes días en que autoridades de Guadalajara anuncien si El Baratillo, así como el tianguis de Polanco -que también abrió sus puertas- podrán instalarse la siguiente semana.


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