La acumulación de contenedores de mercancía procedente de Asia en el puerto de Manzanillo, Colima; generó algunas afectaciones en diversas regiones del país.
Entre ellas, la zona de Jalisco, en donde se retrasó la entrega de materias primas de industrias, por lo que Grupo México, concesionaria de Ferrocarriles Mexicanos (Ferromex) duplicó su capacidad de operaciones para reducir el estancamiento de contenedores en el puerto.
Héctor Ayala, gerente Intermodal de Grupo México Transportes, indicó que entre los sectores afectados están la “tiendas de autoservicio, industria de la construcción, la industria del acero, madera, productos cerámicos, con las que hoy en día tienen una mayor cantidad de contenedores disponibles para desalojar”.
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La mercancía que mayor tiempo estuvo detenida en el puerto fue la relacionada a la del consumo, es decir, con el “producto que está en tiendas de conveniencia o de autoservicio, que su producción no necesariamente concluyó en México.
Ampliar las corridas para darle salida a los miles de contenedores con mercancía detenida en el puerto de Manzanillo, les implica un esfuerzo extraordinario, ya que se requirió mover máquinas y carros de otras zonas para lograr el objetivo y que las empresas ya no tuvieran afectación -sobre todo- las de Jalisco.
La importancia de estas acciones radica en que el 60% de los contenedores van al Valle de México, el 30% a Monterrey y el 10% para la terminal intermodal de Guadalajara, en donde se tiene un servicio diario para los depósitos de importación y uno de regreso que lleva vagones vacíos a Manzanillo para que sean cargados a barcos.
“Por los volúmenes que el puerto opera son producto de una inicial acumulación de contenedores asiáticos y esto viene en coyuntura o paralelo de todas las afectaciones a la producción que hubo en Asia cuando -en su momento- suspendieron las actividades (por Covid-19), y desde septiembre del año pasado retoman su actividad, incrementan los volúmenes.
Estas acciones implicaron duplicar la capacidad, ya que de 900 plataformas asignadas a los corredores intermodales, se pasó a mil 900 asignadas al movimiento de contenedores a lo largo de los 10 mil kilómetros de vías que tienen como grupo, a lo largo de 24 estados y representan el 86% del Producto Interno Bruto del País (PIB).
Por si no te enteraste:
El mover una mayor cantidad de contenedores -sin duda- les implica un mayor riesgo de seguridad en algunas entidades, pero la estrategia implementada consideró tener todos los canales necesarios para tener “garantizado a nuestros clientes que no haya eventos de vandalismo o ataque que represente alguna desviación en términos de las condiciones de la carga y que llegue a su destino”.
En Jalisco, una de las zonas complicadas para la circulación del tren era Las Juntas y El Tapatío en Tlaquepaque, en donde detenía la marcha y hurtaban mercancía de todo tipo.
Ante esto -dijo- que ya se redujo el robo “gracias a la comunicación y planes de ejecución que hay entre los equipos del lado de Ferromex responsables de esas tareas y, evidentemente, la cooperación por parte de la autoridad federal, estatal y municipal”.
Explicó que había muchos equipos de vandalismo que atentaban contra el flujo del tren, pero hoy en día la velocidad y la longitud de los mismos se incrementó, la potencia de las locomotoras también, lo que permite la correcta operación en el movimiento de carga.
Finalmente, señaló que con este plan de trabajo de incrementar el 100% las operaciones, es decir, que salgan dos trenes desde el puerto de Manzanillo todos los días, se espera que se desalojen los contenedores lo antes posible.
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En el puerto de Manzanillo se realizó el movimiento del 45% de los seis millones y medio de contenedores operados en el 2020.
En toda la red de vías de Grupo México hay 800 máquinas de tren modernas, de primera generación.
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