Al proveer los elásticos para la elaboración de los codiciados cubrebocas, ha hecho que las mercerías del Centro tapatío no se derrumben financieramente, sin embargo los ingresos que perciben por esas ventas no son suficientes para mantener a la plantilla laboral de cada uno de esos negocios.
El elástico para los tapabocas, es el único producto que el Ayuntamiento de Guadalajara les permite vender a puerta cerrada, ya que el resto de su mercancía se le considera no esencial.
El señor Virgilio Castro, es propietario del negocio Servimercería Estambres, situado en la calle Zaragoza, en el corazón de Guadalajara, en entrevista con EL OCCIDENTAL refirió que ha tenido buenas ventas de elástico. Calcula que a partir de la comercialización que hace al igual que la de sus compañeros mercerilleros, diariamente se elaboran en Guadalajara más de un millón de cubrebocas a nivel casero y en pequeños talleres, es por ello que no pueden dejar de vender ese producto.
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Los que se utilizan en los citados protectores son los de cuatro y cinco milímetros, mismos que es están escasos ya que las empresas dejaron de producirlos al obtener mayores ganancias de otros de mayor grosor, como los usados para las mascarillas para cubrir el rostro completo.
"Tenemos mucha demanda (de elástico), de hecho la fábrica ha subido muchísimo los precios porque ya no hay materias primas en México. Ha sido un poco especulativo el mercado. Prácticamente nos la hemos pasado vendiendo nada más eso", señaló el comerciante, quien también comentó que se han apoyado de la venta en línea a través de la página www.servimerceria.com mediante la cual han realizado pedidos a diversas partes de la República.
Son las amas de casa quienes principalmente recurren a las mercerías para adquirir todo lo necesario para los protectores, y así poder vivir de su fabricación y venta.
A pesar de la demanda de ese material, reconoció que ese ingreso es apenas el 25 por cierto de los recursos que requiere para pagar el salario de sus trabajadores, ya que incluso tuvo que mandar a cinco empleados a cuarentena y contratar a otros.
"Estoy como un 25 por cierto de mi plantilla, sobre todo porque la gente mayor ya tienen cuatro semanas que se mandaron a descansar y algunas personas que tienen padecimientos, cubrimos esa necesidad de las ventas en líneas con gente joven", detalló el también ingeniero.
Contó que desde principios de abril destinó varios días para realizar el engorroso trámite en línea de un crédito estatal para micro y pequeñas empresas, sin embargo a tres semanas de ello y de que se le otorgó un número de registro, aún no tiene respuesta por parte del Ejecutivo Estatal sobre la situación de su solicitud, sin embargo confía en que el apoyo llegará para hacer frente a la difícil situación económica que enfrenta.
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