La osteoporosis tiene implicaciones, además del sector salud en lo económico-social por lo que urge una regulación y políticas públicas que permitan reducir la carga de la fragilidad ósea en México y elevar el nivel de bienestar.
El reto en el país es que las instituciones puedan implementar modelos de atención multidisciplinaria para atender y prevenir fracturas secundarias asociadas a osteoporosis, traería un beneficio económico al sistema de salud.
En el segundo Foro Legislativo “Manejo integral y prevención de fracturas por osteoporosis en México”, el presidente de la Asociación Mexicana de Metabolismo Óseo y Mineral (AMMOM), José Francisco Torres Naranjo, señaló que la osteoporosis es una enfermedad caracterizada por el deterioro del tejido óseo que condiciona un mayor riesgo de fracturas.
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Este padecimiento puede pasar desapercibido y solo hasta que se sufre una fractura se descubre, describió que la pérdida de hueso no muestra síntomas tan notorios, sin embargo, algunas señales de alerta pueden incluir encorvamiento de la columna, dolor de espalda, pérdida de estatura y huesos que se rompen más fácilmente de lo esperado.
Por su parte, la senadora Lilia Margarita Valdez Martínez, miembro de la Comisión de Salud, asumió el compromiso, que a través de la legislación atender este problema de salud pública.
En México diversas instituciones han propuesto implementar un modelo de atención para pacientes con osteoporosis, que permita trabajar en la prevención de nuevas fracturas y establecer pautas para el diagnóstico y tratamiento multidisciplinario para el manejo de la osteoporosis y la reducción de costos en su atención.
De acuerdo con datos nacionales, en el 2020 los costos de fracturas por fragilidad en México pudieron haber ascendido hasta 364 millones de dólares, un alza de 59 millones de dólares respecto a las estimaciones para 2015.
El doctor Rolando Espinosa del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) señaló que la información actualizada que se tiene en el mundo acerca de la osteoporosis se ve reflejada en dos guías institucionales que están por publicarse en el país.
Las guías servirán de herramienta para médicos, estudiantes de medicina, abordarán la importancia de la osteoporosis y proporcionan valiosos elementos para su prevención y tratamiento.
De acuerdo con datos de la Unidad Coordinadora de Fracturas, del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) para el año 2025 habrá 2.6 millones de fracturas de cadera a nivel mundial. La prevalencia aumentará un 5% con cada año de edad, y para aquellos que han sufrido una fractura por fragilidad, el riesgo de sufrir una nueva fractura será mucho más alto.
En la actualidad, en una fractura de cadera, menos del 50% de las personas se recuperan completamente, el 25% presenta una discapacidad y la mortalidad aumenta entre el 20 y 30% al año del evento.
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