En Jalisco no hay evidencia de contagios ocasionados por ómicron, la nueva variante de Covid-19, informó el Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, luego de reunión con la Mesa de Salud y aceptó que el riesgo existe y en algún momento la varían te que se ha confirmado es más contagiosa que las anteriores, llegará al estado.
“Tenemos que estar preparados, porque tarde o temprano llegará”, agregó el mandatario estatal.
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Destacó que Jalisco está en semáforo verde hasta el próximo 26 de diciembre e hizo un llamado a sus habitantes a extremar medidas durante las celebraciones de Navidad y Año Nuevo, tomando en cuenta que en el estado suman 399 mil 670 contagios y 17 mil 584 decesos.
“Nuestra infraestructura hospitalaria está preparada para cualquier cosa, tenemos los datos de cómo en estos días llegamos al nivel más bajo de hospitalizaciones en todo lo que va del año y por ello el poder tener números positivos para nosotros es una oportunidad para preparar nuestra ruta de trabajo para el próximo año”.
Actualmente en Jalisco hay 129 personas hospitalizadas por coronavirus, la cifra más baja en lo que va del año, además de que un 83% de sus habitantes ya cuentan con al menos una dosis de vacuna contra Covid-19 aplicada, lo que permite un panorama alentador.
Mencionó que no habrá por ahora nuevas restricciones o cambios en la estrategia que se lleva para control de contagios en Jalisco y será hasta el 14 de enero cuando de nuevo se reúna la Mesa de Salud, para dar un corte luego de las fiestas decembrinas
Recordó que el regreso a clases será el 3 de enero de manera virtual y durante dos semanas los estudiantes llevarán clases a distancia, para volver el 17 de enero a la presencialidad, estimando para esa fecha ya tener vacunados a los docentes y todo el personal educativo con la dosis de refuerzo.
Agregó que se mantiene suspendidas las peregrinaciones y revisarán con ayuntamientos, los festejos de los Reyes en la primera semana de enero en Cajititlán, así como la Virgen de la Candelaria en San Juan de los Lagos en la primera semana de febrero.
“Vamos a llegar a un acuerdo para que este tipo de celebraciones religiosas puedan darse con seguridad para quienes asistan”.
