Por responder a una solicitud de transparencia que sí tenía a dos personas anotadas en su nómina, que no se presentaban a trabajar, el delegado de El Salvador, en Tequila, Jalisco, fue destituido por el alcalde.
Miguel García Rivera en sus investigaciones descubrió que un velador y un ayudante general aparecían en la nómina, pero no acudían a laborar. “Contesté la petición que se hizo y vino un disgusto por parte del señor presidente”.
Comentó que también al Alcalde le hizo una solicitud de obras, pero en cuatro meses no le respondió y por lo tanto en un encuentro más le dijo “para aviadores sí hay, pero no para obras”. Eso aumentó la molestia del munícipe.
Comentó que lo citaron entonces con el director de Recursos Humanos, Iván Anguiano, y este le dio a conocer que estaba despedido bajo el argumento de “razones políticas”. Siendo su cargo el de delegado, sólo el Pleno del Ayuntamiento puede destituirlo o removerlo.
El Salvador es un pueblo emblemático que tiene una población de seis mil 300 habitantes y por lo tanto hasta el último par de manos de un funcionario es importante.
Dijo que recibió una solicitud de transparencia sobre la nómina y así detectó que tenía al menos dos personas que cobraban ahí, pero no acudían a laborar. Se trata de Pedro Montes Toribio, contratado como velador, y Édgar Iván Miramontes Toribio, como ayudante general.
El ex delegado explicó que El Salvador es la delegación más grande del municipio y enfrenta malos caminos, además de carencia de médicos y de medicinas.
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