A poco más de un mes de que se cancelara la licitación para chalecos balísticos, que se destinarán a policías de Guadalajara, la dirección de Adquisiciones del gobierno tapatío definió las nuevas bases con las que buscarán al mejor proveedor para la compra de los mismos.
Entérate:
De acuerdo al presidente del Comité de Adquisiciones, David Mendoza Martínez, se determinó que el peso máximo del chaleco sea de tres kilogramos en talla grande, y se agrega la característica de “retardante al fuego”, además, se requerirá de una muestra física para la prueba balística, cuyo costo será asumido por el proveedor.
“Se solicita que el proveedor interesado en participar cubra el costo de la prueba balística; en la base anterior la prueba era solo para el ganador y el municipio pagaba la prueba, con esto lo que estamos buscando es que las pruebas balísticas sean a cargo del proveedor y que tengamos la certificación por parte de Ciencias Forenses, anteriormente lo hacíamos a través de la certificación que presentaban los proveedores”.
También se agregó el costo y método de pago de la prueba, el cual es de 13 mil 583 pesos por chaleco balístico y la misma cantidad por placa, conforme a la Ley de Ingresos del Estado de Jalisco para el ejercicio fiscal 2020.
Chécalo:
Explicó que el proveedor que resulte ganador deberá entregar un chaleco extra para que del lote se tome uno al azar para realizar otra prueba balística, y así confirmar la calidad del equipo y cubrir el costo correspondiente.
Además, se cambió el tiempo de entrega a 40 días naturales a partir del fallo y se estableció que los criterios de evaluación serán 70 por ciento calidad y 30 por ciento oferta económica; y se determinó contar con un seguro de responsabilidad civil por 20 millones de dólares a nombre del fabricante con endoso al licitante.
“El de la calidad que vale el 70% de la propuesta, tomando en cuenta la evaluación de la prueba balística del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, dejando fuera cualquier determinación que no sea del instituto y que es una prueba balística que está certificada y que tiene todas las características técnicas para ser avalada”, agregó el funcionario municipal.
La definición nuevamente de estas bases se dio en un contexto altamente criticado por varios sectores empresariales, pertenecientes al Comité de Adquisiciones, y a regidores de Morena, quienes en su momento aludieron a la intención del ayuntamiento de cambiar las reglas de la licitación para direccionar la compra a un proveedor que cumpliera con las nuevas especificaciones.
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