/ lunes 31 de julio de 2023

Colonias con agua turbia sugieren que se realicen más pruebas para determinar su calidad

El agua y el saneamiento son reconocidos como derechos humanos

En una batalla que lleva ya tres años contra las aguas turbias que surte el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (Siapa), habitantes de fraccionamientos como Jardines Alcalde, Colinas de la Normal, Miraflores y otros de la zona, mejor optaron ya por poner filtros, algunos dos hasta tres por casa ya que no les han respondido a las exigencias. Hoy cuando el problema sigue, exigen junto con especialistas que se vuelvan a revisar las aguas y que se sepa de manera transparente qué estamos consumiendo en la zona metropolitana.

El maestro Antonio Rocha Santos, catedrático urbanista, recuerda que en el año 2010 la ONU reconoció al agua y el saneamiento como derechos humanos y ese mismo año se instó a los países para su cumplimiento efectivo.

Te recomendamos:

Se concentra el problema al norte de Jalisco

Colonias situadas al norte de la ciudad y cercanas a las avenidas Alcalde y Ávila Camacho fueron las primeras en sufrir esta serie de problemas constantes. Sus habitantes comenzaron a padecer de enfermedades gastrointestinales, picazón de piel, salpullido, caída de cabello e iniciaron con denuncias de que recibían aguas turbias mismas que en su momento fueron ignoradas.

En aquel tiempo se comentó que “ante las notas que han circulado en medios de comunicación y redes sociales en el sentido de que habitantes de varias colonias han estado recibiendo en sus casas agua turbia, con un olor desagradable y un color amarillento y café y preocupados por las características de Potabilidad y Salubridad del agua que está llegando a las tomas domiciliarias de varias colonias del Municipio de Guadalajara y zona metropolitana, un grupo de investigadores de la Universidad de Guadalajara y vecinos han estado realizando estudios y análisis para determinar si el agua que reciben en sus casas se apega a los requisitos que establece la Norma Oficial Mexicana número 127 S.S.A 1994, incluso se interpuso una queja en la CEDH”.

Sus habitantes comenzaron a padecer de enfermedades gastrointestinales, picazón de piel, salpullido, caída de cabello. Foto. Archivo | El Occidental

Los acuerdos desoídos

Estas son las propuestas que se hicieron en el mes de octubre del 2020:

  • ­Integrar una mesa de trabajo con vecinos de las colonias afectadas, así como a la Conagua y a la Cofepris para que conjuntamente con los laboratorios que propongan los vecinos se realicen estudios de laboratorio para verificar el tipo de sustancias que se encuentran en el agua que llega a las casas. También representantes con experiencia y capacidad del Siapa.
  • ­Realizar una visita de inspección a las fuentes de suministro de agua potable a la zona metropolitana Guadalajara para verificar el estado en que se encuentran los canales y los ductos que conducen el agua, así como las plantas de tratamiento, las plantas de bombeo y la estructura de distribución del agua para el uso doméstico.
  • ­Una vez que se tenga el diagnóstico de las sustancias contaminantes debe elaborarse una propuesta de solución para que el agua que llega a los domicilios sea verdaderamente potable y salubre cumpliendo cuando menos con lo que establece la Norma Oficial Mexicana número 127 S.S.A. 1994
  • ­Gestionar ante el Gobierno Federal la actualización y adecuación de la norma oficial mexicana 127 SSA 1994, de acuerdo a las características de contaminación que tienen las aguas que se suministran al servicio doméstico en el Área Metropolitana de Guadalajara.

Los estudios reveladores

EL OCCIDENTAL tiene en su poder los estudios que investigadores y vecinos hicieron en aquellas fechas en el laboratorio Amycsa acreditado por la EMA y cuyos resultados se dieron a conocer entonces el 14 de octubre del 2020.

Arrojaron entonces que mezclados en el agua había: platino, cobalto, cloro en grandes cantidades y coliformes fecales en cantidades que están fuera de forma.

Pero no son los únicos, tres meses después y ante nuevas denuncias a principios del 2021 se volvieron a realizar estudios y el 21 de enero se informó de que ahora se había encontrado mercurio, cadmio y arsénico.

Esto fue confirmado por Javier Becerra, titular de la Dirección de Derechos Humanos del Alto Comisionado de la ONU. Un estudio solicitado por colectivos relacionados con el tema del agua reiteró que la antigüedad de las tuberías de la Zona Metropolitana sería un factor determinante considerando que el 68 por ciento de la red de distribución del Siapa al 2021, aún respondía a material como el asbesto, prohibido en al menos 50 países.

Se ha encontrado platino, cobalto, cloro y coliformes fecales en el agua. Foto. Archivo | El Occidental

Tres años y todo sigue igual

El maestro Antonio Rocha considera que todo sigue igual y el escenario podría ser peor. En ese entonces faltó voluntad y fueron los vecinos quienes terminaron imponiendo la solución en sus propios hogares con la instalación de hasta tres filtros, de diferentes componentes, para tratar de llevar agua verdaderamente potable al interior de su hogar. Algunos de esos filtros, a la fecha, los siguen cambiando cada mes.

“Aun así llega turbia el agua y con sedimentos, los estudios que se hicieron hace casi 3 años, arrojaban residuos de cobalto y platino, coliformes fecales y exceso de cloro.

Varios vecinos se quejan de irritación en la piel y caspa”. La autoridad al principio no reconocía qué llegaba turbia el agua y ya lo hace. “Está cerrado el Siapa en no dar el mantenimiento que requieren las redes e instalaciones”.

En una batalla que lleva ya tres años contra las aguas turbias que surte el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (Siapa), habitantes de fraccionamientos como Jardines Alcalde, Colinas de la Normal, Miraflores y otros de la zona, mejor optaron ya por poner filtros, algunos dos hasta tres por casa ya que no les han respondido a las exigencias. Hoy cuando el problema sigue, exigen junto con especialistas que se vuelvan a revisar las aguas y que se sepa de manera transparente qué estamos consumiendo en la zona metropolitana.

El maestro Antonio Rocha Santos, catedrático urbanista, recuerda que en el año 2010 la ONU reconoció al agua y el saneamiento como derechos humanos y ese mismo año se instó a los países para su cumplimiento efectivo.

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Colonias situadas al norte de la ciudad y cercanas a las avenidas Alcalde y Ávila Camacho fueron las primeras en sufrir esta serie de problemas constantes. Sus habitantes comenzaron a padecer de enfermedades gastrointestinales, picazón de piel, salpullido, caída de cabello e iniciaron con denuncias de que recibían aguas turbias mismas que en su momento fueron ignoradas.

En aquel tiempo se comentó que “ante las notas que han circulado en medios de comunicación y redes sociales en el sentido de que habitantes de varias colonias han estado recibiendo en sus casas agua turbia, con un olor desagradable y un color amarillento y café y preocupados por las características de Potabilidad y Salubridad del agua que está llegando a las tomas domiciliarias de varias colonias del Municipio de Guadalajara y zona metropolitana, un grupo de investigadores de la Universidad de Guadalajara y vecinos han estado realizando estudios y análisis para determinar si el agua que reciben en sus casas se apega a los requisitos que establece la Norma Oficial Mexicana número 127 S.S.A 1994, incluso se interpuso una queja en la CEDH”.

Sus habitantes comenzaron a padecer de enfermedades gastrointestinales, picazón de piel, salpullido, caída de cabello. Foto. Archivo | El Occidental

Los acuerdos desoídos

Estas son las propuestas que se hicieron en el mes de octubre del 2020:

  • ­Integrar una mesa de trabajo con vecinos de las colonias afectadas, así como a la Conagua y a la Cofepris para que conjuntamente con los laboratorios que propongan los vecinos se realicen estudios de laboratorio para verificar el tipo de sustancias que se encuentran en el agua que llega a las casas. También representantes con experiencia y capacidad del Siapa.
  • ­Realizar una visita de inspección a las fuentes de suministro de agua potable a la zona metropolitana Guadalajara para verificar el estado en que se encuentran los canales y los ductos que conducen el agua, así como las plantas de tratamiento, las plantas de bombeo y la estructura de distribución del agua para el uso doméstico.
  • ­Una vez que se tenga el diagnóstico de las sustancias contaminantes debe elaborarse una propuesta de solución para que el agua que llega a los domicilios sea verdaderamente potable y salubre cumpliendo cuando menos con lo que establece la Norma Oficial Mexicana número 127 S.S.A. 1994
  • ­Gestionar ante el Gobierno Federal la actualización y adecuación de la norma oficial mexicana 127 SSA 1994, de acuerdo a las características de contaminación que tienen las aguas que se suministran al servicio doméstico en el Área Metropolitana de Guadalajara.

Los estudios reveladores

EL OCCIDENTAL tiene en su poder los estudios que investigadores y vecinos hicieron en aquellas fechas en el laboratorio Amycsa acreditado por la EMA y cuyos resultados se dieron a conocer entonces el 14 de octubre del 2020.

Arrojaron entonces que mezclados en el agua había: platino, cobalto, cloro en grandes cantidades y coliformes fecales en cantidades que están fuera de forma.

Pero no son los únicos, tres meses después y ante nuevas denuncias a principios del 2021 se volvieron a realizar estudios y el 21 de enero se informó de que ahora se había encontrado mercurio, cadmio y arsénico.

Esto fue confirmado por Javier Becerra, titular de la Dirección de Derechos Humanos del Alto Comisionado de la ONU. Un estudio solicitado por colectivos relacionados con el tema del agua reiteró que la antigüedad de las tuberías de la Zona Metropolitana sería un factor determinante considerando que el 68 por ciento de la red de distribución del Siapa al 2021, aún respondía a material como el asbesto, prohibido en al menos 50 países.

Se ha encontrado platino, cobalto, cloro y coliformes fecales en el agua. Foto. Archivo | El Occidental

Tres años y todo sigue igual

El maestro Antonio Rocha considera que todo sigue igual y el escenario podría ser peor. En ese entonces faltó voluntad y fueron los vecinos quienes terminaron imponiendo la solución en sus propios hogares con la instalación de hasta tres filtros, de diferentes componentes, para tratar de llevar agua verdaderamente potable al interior de su hogar. Algunos de esos filtros, a la fecha, los siguen cambiando cada mes.

“Aun así llega turbia el agua y con sedimentos, los estudios que se hicieron hace casi 3 años, arrojaban residuos de cobalto y platino, coliformes fecales y exceso de cloro.

Varios vecinos se quejan de irritación en la piel y caspa”. La autoridad al principio no reconocía qué llegaba turbia el agua y ya lo hace. “Está cerrado el Siapa en no dar el mantenimiento que requieren las redes e instalaciones”.

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