Diferente a todas las Judeas en vivo pero el fervor y la Fe es la misma, los habitantes del Barrio de Analco llevaron a cabo su Viacrucis en donde más de 600 personas participaron en la representación, mientras que diversas familias se organizaron para crear cada una de las 13 estaciones que Jesús vivió en su calvario.
El padre José Dolores Aguayo, uno de los organizadores explica que él quiso impulsar una Judea en Vivo como la de Santa Rosa de Lima o la de San Martín de las Flores, pero los habitantes del barrio le dijeron que no, que la tradición era a través de cuadros en cada una de las estaciones.
Los ánimos entre todos los habitantes para llevar a cabo esta actividad religiosa no decaían y más de 600 vecinos del barrio caminaron detrás de Jesús, quien a lo largo de su peregrinar soportó la sed, las espinas de La Corona, la pesada cruz que cargó, pero sobre todo los azotes que los romanos le dieron a cada paso que daba y que se acentuaban si se caía.
Dijo que esta procesión ya es un distintivo del barrio y “queremos posicionarla como un elemento metropolitano y a la vez queremos que tenga un Protección como San Luis Potosí, Taxco y Zacatecas”, pero sobre todo recuperar la grandeza del barrio en sus inicios.
La representación inició en la puerta De la Iglesia de San José de Analco, en donde el pueblo clamó por la liberación de Barrabás y se sentenció a muerte al Mesías, de ahí continuó su largo camino hacia la crucifixión bajo los candentes rayos del sol que ya comenzaban a calentar el ambiente y que concluiría en la cruz.
Al mismo tiempo se dio el Viacrucis de los Enfermos, quienes realizaron una serie de oraciones para pedir por su sanción y para que la salud le regresara a todos los habitantes de ese tradicional barrio de Analco.