A la baja el rendimiento restaurantero

Inciden desde los altos costos de la electricidad pasando por la inseguridad hasta las mantas en la “Glorieta de los Desaparecidos”

Elsa Arenas

  · domingo 10 de febrero de 2019

Restaurantes han padecido por altos costos de la CFE. Foto: Archivo.

El cierre de 2018 y lo que va de 2019 (enero) los corredores gastronómicos y restaurantes han padecido por altos costos de la CFE, la inseguridad y la ausencia de hasta el 50% de clientes debido a la crisis de gasolina, informó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC) capítulo Jalisco, Aldo Alejandro de Anda García.

El presidente electo, próximo a tomar protesta es te martes 12 de febrero, informó que los corredores gastronómicos más afectados han sido Chapultepec y López Cotilla, ya que desde noviembre han realizado apagones como forma de protesta por los altos cobros de la luz, así como la mala imagen que representa para el turismo la toma ciudadana de la Glorieta de los Niños Héroes con las mantas de jaliscienses desaparecidos.

“Actualmente el sector restaurantero está sufriendo mucho, muchísimo; específicamente enero me sorprendió mucho la cantidad de problemas que tuvieron restaurantes que normalmente no venían arrastrando problemas (…). A Chapultepec le ha pegado mucho un tema de imagen que nos solidarizamos con las personas afectadas, pero no deja de ser un tema complicado de imagen con la ‘Glorieta de los Desaparecidos’”, dijo De Anda.

Y es que los promotores turísticos prefieren llevarse a los visitantes a otros corredores gastronómicos como Providencia, Chapalita, avenida México y Andares.

En inseguridad dijo que los que más han sufrido son Providencia, López Cotilla y Chapultepec, pues aunque se han tomado muchas medidas para disminuir la inseguridad, nunca es suficiente.

Alejandro de Anda mencionó que el tema del desabasto de gasolina afectó mucho a todos los destinos turísticos como Chapala que estuvo al 50% de ocupación durante tres semanas, igual que Mazamitla y restaurantes de la ZMG, que tuvieron que prescindir de personal, aunque fueron empleos emergentes o eventuales.