El pueblo de Temacapulín, Acasico y Palmarejo está “dolido” con el Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, por su comportamiento a lo largo de su gestión y durante su visita a la zona el pasado domingo, dijo Abigaíl Agredano, presidenta del comité que representa al poblado que hasta hace unos días, estaba en riesgo de inundarse.
“No solo el pueblo de Temacapulín, sino todo el pueblo de Jalisco está muy dolido con el Gobernador y el perdón se puede dar, pero también necesitamos un gesto hacia nosotros de que él también nos acepta como somos y ese momento puede llegar, pero vemos que el gobernador tiene mucho orgullo”, dijo refiriéndose a la conciliación que el fin de semana se solicitó por parte del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en su visita al poblado.
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Recordaron que el pasado domingo acordaron aceptar la alternativa de la Presa El Zapotillo, siempre y cuando se garantice la seguridad de no inundación, así como reacondicionamiento de la presa con un vertedor con una altura más baja al poblado de Palmarejo, lo que garantizaría la seguridad aún con tormentas copiosas y que en futuras administraciones no será modificada la obra.
Pidieron además la reparación de daños materiales e inmateriales durante los últimos 16 años a causa del proyecto, así como la identificación de un presunto mal uso de fondos públicos y su recuperación; y la garantía de que el agua del Río Verde beneficie a habitantes jaliscienses, principalmente a personas de escasos recursos en el área metropolitana de Guadalajara.
“Queremos recuperar la paz que nos fue robada por la imposición de la presa El Zapotillo en nuestro territorio, reactivar la economía, revivir y fortalecer nuestras comunidades, ejercer nuestro derecho al desarrollo que fue truncado y la autodeterminación de nuestros pueblos”, agregó Gabriel Espinoza, portavoz de los pobladores.
Aplaudieron además el compromiso de López Obrador de volver en un mes, acompañado de miembros del gabinete federal y aclaró que “nunca los pueblos hemos estado en contra de cumplir con el derecho humano al agua para todos y para siempre” y pidieron que no se les señale.
De su parte, María González Valencia, integrante del Instituto Mexicano para Desarrollo Comunitario (IMDEC) destacó que habrá ajustes, pues el proyecto original de 80 metros de altura de la presa beneficiaba solo a León, Guanajuato y “una presa ajustada de 48 o 46 metros le da perfectamente a Guadalajara su demanda, eso es importante aclararlo por las reacciones que ha tenido el gobernador del estado”.
Además, invitó a Alfaro Ramírez a evitar disgustos. “No se puede enojar el Gobernador, al contrario, tiene que buscar otras alternativas para solucionar el abastecimiento”.
