La espera termino para Guadalajara en donde la magia del Circo del Sol comenzó este miércoles con una función especial, donde se vivió una experiencia visual en donde el personaje principal del espectáculo es la mujer que corre, inspirada en los indios tarahumaras y que al mismo tiempo es una mariposa monarca, ella es también la guía y el hilo conductor por este viaje mágico con humanos y seres fantásticos.
Con un foro para dos mil 500 espectadores, el Cirque du Soleil demostró una vez más que no tiene límites en el escenario, y cuya movilidad de 360 grados que permiten llevar al público a un mundo de fantasía, esta vez, con sello mexicano.
Un inmenso disco que se asemeja al calendario maya es el escenario de fondo de varios cuadros escénicos en donde aparecen mariachis, cactus, flores de cempasúchil, marimbas y enmascarados.
Con algunas intervenciones y canciones en español, Luzia juega con la luz y el agua abarcando hasta el último rincón de la gran carpa.
Cabe destacar que esta producción, es la número 38, cuenta con varios momentos incluso lo invade la lluvia, en donde el agua cuenta con una plasticidad impresionante en escena, creando formas alucinantes a los ojos de los espectadores, siendo este último uno de los elementos principales.
En medio de estos paisajes aparecen los actores, complementando la decoración con sus magníficos vestuarios, los cuales cambian radicalmente en cada una de las escenas, y combinan formas de colores llamativos que armonizan entre ellos.
Luzia se presentará en Guadalajara hasta el 16 de septiembre, posteriormente estará en Monterrey, para cerrar su estadía en la Ciudad de México.
