Humberto Hinojosa apenas está saboreando el éxito del lanzamiento de la película Camino a Marte que tuvo un costo de inversión de más de 25 millones de pesos, cuando ya volvió a colocarse en la silla de director, ahora para entrar al relevo en la bioserie de Luis Miguel que produce Netflix.
“Fíjate que me encantaría platicar cosas, pero me lo impide la confidencialidad del contrato, no puedo, pero sí, sí me encantaría decir qué capítulos yo dirijo…”, declaró sobre el proyecto que se graba en formato 4k en los foros de los Estudios Churubusco Azteca.
Y ahondó en torno a dirigir a Diego Boneta personificando a Luis Miguel. “Como director de escena lo que más me interesa es seguir vigente y seguir haciendo lo que me gusta, mientras tenga la oportunidad de hacerlo, yo voy a estar feliz”.
Y, en contraparte, se refirió al hecho de haber tenido como locación los escenarios de Baja California Sur para la filmar Camino a Marte.
“Nos significa el rodaje de la historia fílmica, una carta de amor para dicha región mexicana, porque su escenografía natural es un regalo para quienes no la conocen y los que sí la recuerden para un nuevo regreso”.
La película que protagonizan Tessa Ia, Luis Gerardo Méndez y Camila Sodi contó con una inversión de 25 millones de pesos.
“Los recursos quedaron dentro de la pantalla grande, tanto los actores como la producción fueron muy inteligentes en poner todas las monedas en la mesa y que todo fuera a favor de la historia”, dijo y agregó que los actores tuvieron un rodaje complejo y duro, en sitios complicados. “Camila literal condujo desde Tijuana hasta La Paz, fue una gran experiencia personal y fílmica”.
La música de la película la realizó el compositor Rodrigo Dávila y en el soundtrack aparecen también Zoé, Costera y Reyno.
La película, dijo Hinojosa, “es una oda a la esperanza, cuando nos damos cuenta que las cosas tienen una fecha de caducidad en la vida es cuando hacemos un recuento y valoramos lo que sí tenemos y el hoy y el ahora”.