La idea de tramos eléctricos para el Tren Maya no es nueva. A principios de año, Grupo Caabsa, de los hermanos Amodio, propuso un proyecto de sistema eléctrico secundario en la zona metropolitana de Cancún.
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) dio a conocer que unos 700 kilómetros de la ruta, poco más de 40 por ciento del total, será operada a base de energía eléctrica, mientras que el resto será híbrida, es decir, los trenes operarán a base de diésel y electricidad.
En un comunicado, el Fonatur indicó que el modelo eléctrico será implementado en los tramos de mayor demanda, es decir, los que cubren la ruta de Mérida a Cancún y luego hasta Chetumal.
➡️ Proyectan que tren eléctrico una a Cancún con ruta maya
El proyecto que presentaron los hermanos Amodio junto con Grupo Altavista a principios de año, que fue publicada por El Sol de México, consiste en un Sistema de Transporte Alimentador Cancún–Tren Maya, para llevar a pasajeros desde la estación del tren en esa localidad al centro de la ciudad y la zona hotelera, y viceversa.
La ruta del tren eléctrico elevado rodea la laguna Nichupté y atraviesa la zona hotelera de forma paralela al bulevar Kukulcán hasta llegar al aeropuerto Aeropuerto Internacional de Cancún, donde se ubicará una de las estaciones del Tren Maya, que se calcula atienda a 113 mil usuarios al día.
El proyecto del tren eléctrico alimentador surgió luego de que la Agencia de Proyectos Estratégicos del Estado de Quintana Roo (Agepro) descartó el proyecto de Fonatur de construir dos estaciones del Tren Maya en Cancún, una en el aeropuerto y otra en el centro de la ciudad.
El sistema eléctrico planteado para esta alternativa de transporte público se extenderá al magno proyecto de la actual administración.
Según Fonatur, con el anuncio de este jueves solo se adelanta la electrificación al inicio de operaciones del tren, pero se prevé que el resto de la ruta se pueda electrificar en el futuro.
Además, la incorporación de trenes híbridos, que funcionan a basa de electricidad o diésel, dará la ventaja de poder prestar servicios en tramos electrificados y no electrificados.
“Pueden operar en su modo eléctrico y en plena vía hacer el cambio de modalidad y prender el motor diésel-eléctrico para tramos sin cableado ni catenaria. En un momento futuro se podría transicionar a locomotoras impulsadas por hidrógeno”, indicó el organismo federal.
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