Una nueva era comenzaba para el Atlas en la dirección técnica, algo muy común de escuchar en los últimos años para los Zorros que han tenido que cambiar de timón debido a los malos resultados. Necesitados de obtener su primer triunfo en el torneo e irle llenando el ojo al nuevo técnico Diego Cocca, quien aún no está físicamente con el equipo, los Zorros querían festejar de la mejor forma sus 104 años, recibían en la cancha del Jalisco a los también necesitados de triunfo, los Diablos Rojos del Toluca. Rodaba la pelota en la fecha cuatro del Guard1anes 2020.
Otra vez el Atlas fue víctima de sus propios errores, cometiendo dos penales que les costaron una derrota más como locales y que los ha dejado en el fondo. Ahora cayeron 2-1 ante Toluca, con tantos de pena máxima de Alexis Canelo y Rubens Sambueza, además que los rojinegros marcaron, también, desde los once pasos por conducto de Malcorra, todo se sigue derrumbando para un Atlas que no merece perder, pero al final el resultado sigue siendo adverso.
Primer tiempo
De ida y vuelta comenzó el juego, ambos equipos salieron alegres para ir al ataque, mostrando sus armas con disparos importantes, pero ninguno exigió la participación de los arqueros.
Al minuto 14 llegó la primera de peligro extremo, Diego González, zaguero de Toluca quiso salir jugando dentro del área, y la perdió ante la presión de Herrera, la pelota le quedó a Malcorra que no lo dudó y sacó un escopetazo que con furia y rencor terminó por estrellarse en el poste e irse para afuera.
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Se jugaba el 19, Toluca intentó por conducto de Canelo, el atacante le quedó largo el balón, pero le cerró Jesús Angulo, Canelo acabó en el suelo, porque el jugador del Atlas lo alcanzó a tocar, el silbante no marcó nada a primera instancia, pero le llegó la llamada del VAR. Santander Fue a revisar y se percató de que en efecto hubo falta, una muy infantil e innecesaria, pues el jugador de Toluca ya se había ahogado y no iba a alcanzar la pelota.
A cobrar desde los once pasos vino Pedro Alexis Canelo, que con precisión le pegó a la derecha de Vargas, la potencia venció al portero y la mandó al fondo para el 1-0.
Poco duro el gusto y al 26, Toluca regresó el favor, cometiendo una falta dentro del área, Luciano Acosta venía haciendo una gran jugada, y ante la salida del portero García, la quiso bombear y el portero se lo llevó puesto, cometiendo la falta que no tuvo ni que ser revisada. Desde los once pasos vino a cobrar Malcorra, que fuerte y abajo venció a García, para poner el gol del empate.
Atlas quiso ir adelante y al 33 se encontró una el “Ratón” Isijara, quien se vio ante una floja marca y no dudo para sacar un tiro de media distancia que se fue a estrellar al poste, se salvaba otra vez el Toluca y las cosas seguían en empate.
Segundo tiempo
Movidito inició el complemento, ambos equipos siguieron en una ida y vuelta y entregando un juego dinámico. Atlas tenía en Luciano Acosta a su hombre más peligroso, que en sociedad encontró a Malcorra, los choriceros por su parte atacaban a velocidad con Rubens, Estrada y peligrosos e insistentes servicios por parte del “Dedos” López.
Pero los errores siguieron estando a la orden del día, ahora fue el central rojinegro Germán Conti, que se aventó de la tercera cuerda en la entrada de Canelo, lo terminó derribando dentro del área, y hasta sin necesidad de VAR, el silbante marcó la pena máxima. Ahora a cobrar la falta vino Rubens Sambueza, quien con toda su experiencia engañó a Vargas y al centro cobró para poner el 2-1 a favor de la visita.
Al 60, vino el penal más claro de la noche, con una clara falta de Lorenzo Reyes, que trabó abajo al delantero toluqueño, y por más veces que vio las repeticiones Santander, decidió esta vez no marcar y parar la feria de penales.
Camilo Vargas fue el encargado de mantener con vida a los rojinegros, pues al 66 se mandó una señora atajada, a una mano atajó un remate a bocajarro y todavía aguantó el contrarremate para quedarse la pelota y salvar a los suyos, como se ha venido haciendo una constante.
Atlas intentó, buscó, pero Toluca se echó atrás y dejó sin oportunidad a los rojinegros para sellar un importante triunfo para los Diablos que representa oxígeno puro.
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