El semáforo rojo sigue instaurado en el estado de Jalisco, afectando principalmente el diario del Área Metropolitana de Guadalajara, aunque en el caso de los eventos que ya estaba aprobados antes del cambio de color, siguieron su camino, con un aforo limitado, siendo uno de ellos el estadio Jalisco, que abrió sus puertas para el compromiso entre Atlas y el América.
En la tribuna estuvo permitido un 33% de aficionados, que poco a poco fueron llegando a las inmediaciones del Monumental de la Calzada Independencia para ir pasando los filtros sanitarios que se colocaron, uno de ellos un ingreso controlado, toma de temperatura y gel antibacterial. Adentro el uso de cubrebocas hasta la nariz fue obligatorio mientras no se estuviera consumiendo alguna bebida o alimento. La seguridad interna estuvo al pie del cañón con el tema, para evitar alguna multa para los rojinegros o bien que el estadio vuelva a cerrar sus puertas.
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Y siempre que el América juega en la ciudad, es un día especial, pues convocan a muchos aficionados, ya que tiene una nutrida cantidad de seguidores y que siempre orgulloso van a ver a sus águilas al Jalisco. No importó el tema de los boletos limitados, tampoco el horario atípico de domingo por la tarde, en donde el sol se hizo sentir y calor era algo que se sentía pero enserio.
Pero más allá de todo, también era un día festivo y muy importante para la institución del Atlas, que estaba cumpliendo 105 años de existencia, un año más de vida para un equipo muy querido en la ciudad y que ha vivido momentos importantes y de buen futbol, aunque el campeonato de Liga se les ha negado desde 1951. 105 años de emociones en el Jalisco y de ser un equipo querido, con valores firmes y que sigue apostando por ser un formador de jugadores. Razón suficiente para que los aficionados estuvieran contentos de ir a apoyar a su equipo y esperando poder celebrar de la mejor forma los 105 años.