Fue este lunes, cuando Javier Hernández, desde su casa en Los Ángeles, que decidió realizar una transmisión en vivo, a través de su cuenta de Instagram, esto para agradecer el cariño y condolencias que le han mostrado por el sensible fallecimiento de su abuelo Don Tomás Balcázar, una leyenda del futbol mexicano. Aquí se mostró abierto, emocional y lleno de nostalgia y recuerdos para quien en vida fue su principal motor para no bajar los brazos en el mundo del futbol.
Entérate:
“No estoy buscando ni pena, ni aceptación, simplemente es compartirles, quería hacerlo sin preparar nada, que fuera saliendo. No soy ni mejor ni peor que nadie, nada me hace sentirme más, ni menos, aquí estoy, siendo un humano como todos ustedes, no hay dinero, fama que buscar, ni nada que haga sentir nada a nadie. Todos somos diferentes, pero valemos lo mismo y que chingona es la diversidad”, dijo un “Chicharito” visiblemente afectado, triste.
Sus seguidores le estuvieron dando condolencias, entre ellos fans, y también futbolistas como Paulo Dybala, y Hernández agradeció todas las muestras de cariño. También dijo que no viajó a Guadalajara por el tema de la contingencia de salud, pero en cuanto las cosas se reestablezcan vendrá a México a visitar a la familia.
Chécalo:
“No puedo, no quiero arriesgarme mucho, estamos tratando de hacerlo de la manera más prudente y más adelante se podrá hacer algo para recordar a mi abuelito. Ahí estamos todo el día hablando con la familia, recordándolo porque sí se siente su ausencia. Siento puro agradecimiento hacía a él, la vida a y a todos, son recuerdos muy profundos. Viví y crecí con mi abuelo, desde que nací estuve con ellos, convivimos muchísimos".
Toda la vida he amado al deporte, mucha gente cercana a mí, de las cosas que más me costó de ir a Europa, luchar por mis sueños, ir a esa vida extraordinaria, fue el costo que llevaba separarme de ellos, fueron unas de las razones principales, realmente me costó mucho trabajo. Cómo es la vida, en la ciudad y en el equipo que estoy más cerca físicamente de él, sucede esto”.
“Doña Lucha, mi abuelita, está bien, para los que la conocen, obviamente muy triste, pero está plena y feliz de que están ahí todos sus hijos, sus nietos y ella sabe lo que amo, y él la amó, es fuerte y está bien. Es una persona muy fuerte”.
Es noticia:
Hernández dijo que abrió su corazón a todos para recordar a una figura que dio tanto al futbol como Don Tomás Balcázar, alguien que será recordado por lo que hizo dentro y fuera de la cancha. Y también para dejar en claro que le tenía mucho afecto, que siempre apreció cada momento vivido y compartido.
“Sí es doloroso. Siempre ha sido mi angelito, me amaron mis abuelos muchísimo, por eso no hay remordimiento alguno en mis recuerdos, en mi corazón, nos amamos muy chingón siempre, lo disfruté muchísimo, y lo sigo disfrutando porque me lo imagino diciéndome pendejo, cabrón, padrote me decía, todas sus frases, momentos, anécdotas y experiencias”.
“No es fácil, es triste, desagradable, pero es en esos momentos donde encuentras el amor profundo, decides seguirlo amando, sabiendo que no va a haber nada que lo regrese, aunque nunca se irá mi abuelito. Está aceptado, superado, se vive, se siente, nunca voy a dejar de extrañarlo, recordarlo y sentir la tristeza de no estar con él, pero sí está aceptado, era que tarde o temprano sucedería, nos puede suceder a todos en cualquier momento”.
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Después de cerca de 30 minutos de compartir con sus seguidores, decidió ponerse a hacer ejercicio, algo que dice le ha costado trabajo, pues el deporte siempre lo ha ligado al cien por ciento con su abuelo, y en estos momentos le resulta un tema de dolor y tristeza.
