Coahuila cuenta con una bebida ancestral, con cientos de años de historia, que considerada ‘mística’ debido a su uso en ceremonias religiosas y remedio medicinal, siendo usada para controlar el dolor de estómago, un digestivo y hasta para controlar la diabetes. Te contamos todo sobre el sotol, la bebida mística del desierto que te dará una ‘Noche de Fuego’.
Según información publicada por el Gobierno de México, los indígenas autóctonos del norte de México (Tarahumaras y anazasis) han elaborado el sotol desde hace 800 años para realizar ceremonias religiosas y como remedio medicinal, pues su efecto vigorizante con wereke, raíz medicinal, sirve para la diabetes.
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La mística de esta bebida yace en que el primer trago es como un ‘despertar’ no solo para los sentidos sino para la conciencia debido a su carácter fuerte. El sotol cuenta con una graduación que va desde 38 hasta 45 por ciento de alcohol, además de tener un sabor ahumado que recuerda leña y tierra.
Esta bebida obtuvo Denominación de Origen en 2002. Existen cuatro variedades de sotol: sotol blanco o silver, joven o gold, reposado o aged y extra añejo o extra-aged.
¿De qué está hecho el Sotol?
El sotol es típico de la región del norte, en especial de los estados de Durango, Chihuahua y Coahuila. Es hecha de una planta endémica de México llamada ‘Dasylirion wheeleri’, una especie similar al maguey que pertenece a la familia Asparagaceae. Tiene forma de palma con largas y numerosas hojas, las cuales se extienden hasta moldear un tipo de roseta.
¿Cómo se hace el sotol?
Su preparación es similar a la del mezcal; una vez que se recolectan y deshojan las plantas, el sitio de Larousse Cocina apunta que los cogollos y pencas de la Dasylirion se asan, fermentan y se destila el líquido por medio de las técnicas con las que suele elaborar el mezcal.
De manera normal se excava en la tierra para preparar el horno en donde se cocinan las cabezas de la planta que dan ese sabor ahumado. Se destila hasta en dos ocasiones para poder beber el sotol. Se considera una bebida 100 por ciento orgánica, ya que está elaborada a partir de un agave silvestre puro, además de que sigue un proceso artesanal.
Nota publicada en El Sol de la Laguna
