Oscar Ramírez
En nuestro país se anunció con bombos y platillos la llegada de las primeras vacunas contra el Covid-19 a finales del mes de diciembre del año pasado y el discurso por parte del presidente de México fue que se iniciaría con la vacunación de todos los trabajadores del sector salud que están en el frente de batalla combatiendo directamente esta pandemia, desde doctores, enfermeros, camilleros, incluso personal de limpieza que está en áreas covid de los hospitales públicos.
Sin embargo, el discurso dista mucho de la realidad en la aplicación de estas vacunas, toda vez que las mismas se han estado aplicando indebidamente de manera distinta a lo prometido, ya que se han aplicado a los conocidos “siervos o servidores de la Nación” quienes son en pocas palabras el personal de la estructura electoral del gobierno federal quienes son los responsables de levantar censos sobre los apoyos sociales del sector más vulnerable de nuestro país. Lamentablemente, una y otra vez vemos que se hace lo contrario a lo pregonado por AMLO, sin embargo, esto rebasa el descaro de la llamada 4ta transformación.
Cotidianamente en las mañaneras insistentemente ha declarado que; “la corrupción se está combatiendo y está por desaparecer en nuestro país”, sin embargo, una evidente corrupción queda a la vista de todos con la aplicación de las vacunas contra el covid a personas ajenas a la primera línea del sector salud, o de que otra manera se le podría llamar al “apoyo a los servidores de la Nación” ¿corrupción, descaro?
Otro factor a considerar es que el plan de vacunación lanzado desde el centro del país, parece seguir la misma lógica de la manera con que han afrontado la pandemia y abandonado a los micro y pequeños empresarios que representan el 40% de la economía de nuestro país desde marzo del 2020. Pareciera que la prioridad siempre ha estado en usar el Covid19 como justificación de la realidad de nuestro país y la vacuna como botín político.
Aquí me pregunto ¿porque no hacerle frente con todo a ésta desafortunada situación? Los cómo pueden ser variados, y algunos que me llaman la atención son los que está proponiendo el presidente electo Biden del vecino país del norte que el miércoles próximo tomará las riendas de Estados Unidos, quien anunció un plan de ayuda económica; qué el gobierno destinará una suma importante de recursos para lograr que en 100 días estén vacunados 100 millones de norteamericanos, 1,400 dólares a la mayoría de familias americanas, a quienes estén desempleados 400 dólares a la semana, apoyo a las pequeñas empresas, apoyos a todos los estados y municipios (condados) sin importar el color del partido por el cual llegaron a gobernar.
Muchos podrían cuestionar que México no tiene los recursos para plantear lo que propuso el presidente éntrate de los Estados Unidos de Norteamérica, sin embargo hay un dato interesante publicado por Moody’s investors services, en el que países como Nigeria y Etiopía han invertido más que Mexico en apoyos económicos y recursos para afrontar la pandemia. ¿Será falta de voluntad o de recursos? La decisión de no “agarrar al toro por los cuernos” por parte del gobierno de Mexico y que nos ayude a salir juntos cuanto antes de ésta pandemia que a todos nos ha afectado tanto, dejando a un lado las politiquerías y falsos discursos.
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