/ jueves 21 de octubre de 2021

Transporte de terror

Difícil defender a un sistema de transporte cuyos resultados han arrojado cifras por demás escalofriantes. Sólo en el 2020 se contabilizaron 844 accidentes donde se involucraron los peligrosos “doble remolque”, lo cual significa más del 4% del total de unidades involucradas en estos lamentables eventos.

Tan sólo hace unas cuantas horas, el último accidente con fatales resultados en una carretera de alta densidad de tráfico e infraestructura de primer mundo como es la autopista Jalostotitlán-Lagos de Moreno, demuestra por testimonios de testigos y sobrevivientes que antes de impactar un vehículo de carga de frente y en carril contrario a una familia completa proveniente de Autlán de Navarro de la cual fallecieron 7 de sus pasajeros, se vio involucrado luego que el mencionado transporte pesado de carga, muy probablemente, hubiese recibido un coletazo de 1 de esos denominados traileres doble remolque, cuya estabilidad ha sido cuestionada principalmente a partir de las altas velocidades con las cuales suelen bajar por largas y marcadas pendientes y el consecuente problema para controlar su maniobrabilidad y principalmente su frenado, por lo que se han registrado innumerables accidentes, incluso en las casetas de peaje donde han generado estrepitosos choques y muertes, en todo el territorio del país.

Recordemos cuando el Secretario de Comunicaciones y Transportes a principio del sexenio de Enrique Peña Nieto, Ruíz Sacristán, minutos más tarde de haberse registrado un lamentable accidente con un trailer doble remolque en la atiborrada maxipista “del Sol” México-Acapulco, declaró que durante su responsabilidad, metería en cintura a ese tipo de transporte que tanto daño le ha causado a los mexicanos en esas vías rápidas.

No sólo no lo logró antes de fallecer, sino que se ha mostrado a un sector autotransportista capaz de amagar al Gobierno Federal y a los ciudadanos con encarecer los costos del abasto de los insumos que transportan, si a caso se llega a limitar la envergadura de ese tipo de unidades, por cierto, prohibidas en las carreteras de los Estados Unidos de América y algunos caminos estatales de nuestro propio país que han aprobado algunos congresos locales, aun cuando no sea suficiente para desterrarlos en su paso por esos territorios estatales cuando se trata de una vía federal, como suelen ser las autopistas que utilizan principalmente para cruzar de los puertos de embarque, marítimos, ferroviarios y aéreos a las grandes áreas comerciales de abasto en puntos como Guadalajara, Toluca, Monterrey o Ciudad de México principalmente.

Las consecuencias de la utilidad de ese chantaje social que le ha dado grandes utilidades a estos transportistas que utilizan los doble remolques, han sido ampliamente documentadas por entidades como el Instituto Mexicano del Transporte (IMT) en cuyo anuario estadístico de accidentes en carreteras federales (2019) se detalla que …”1,514 camiones unitarios se vieron implicados en accidentes, éstos son el 7.7% del tortal de unidades. El documento señala que los camiones unitarios fueron responsables del 57% de estos hechos, provocando 414 personas heridas y 159 fallecidos en el lugar. Por otro lado el IMT revela que 2,346 vehículos de carga articulados se involucraron incidentes de este tipo, 11.9% del total a nivel nacional”.

Sin embargo las cifras más impactantes son las que señalan que, sólo en ese año 2019, causaron lesiones a 548 personas y la muerte a 286 en los cuales un transporte doble articulado estuvo involucrado en 844 accidentes por lo que el propio IMT calculó su responsabilidad en el 66% de los accidentes en los que participaron.

Sin duda, un sistema de transporte de mercancías terrorífico.

* Académico del CUAAD

Difícil defender a un sistema de transporte cuyos resultados han arrojado cifras por demás escalofriantes. Sólo en el 2020 se contabilizaron 844 accidentes donde se involucraron los peligrosos “doble remolque”, lo cual significa más del 4% del total de unidades involucradas en estos lamentables eventos.

Tan sólo hace unas cuantas horas, el último accidente con fatales resultados en una carretera de alta densidad de tráfico e infraestructura de primer mundo como es la autopista Jalostotitlán-Lagos de Moreno, demuestra por testimonios de testigos y sobrevivientes que antes de impactar un vehículo de carga de frente y en carril contrario a una familia completa proveniente de Autlán de Navarro de la cual fallecieron 7 de sus pasajeros, se vio involucrado luego que el mencionado transporte pesado de carga, muy probablemente, hubiese recibido un coletazo de 1 de esos denominados traileres doble remolque, cuya estabilidad ha sido cuestionada principalmente a partir de las altas velocidades con las cuales suelen bajar por largas y marcadas pendientes y el consecuente problema para controlar su maniobrabilidad y principalmente su frenado, por lo que se han registrado innumerables accidentes, incluso en las casetas de peaje donde han generado estrepitosos choques y muertes, en todo el territorio del país.

Recordemos cuando el Secretario de Comunicaciones y Transportes a principio del sexenio de Enrique Peña Nieto, Ruíz Sacristán, minutos más tarde de haberse registrado un lamentable accidente con un trailer doble remolque en la atiborrada maxipista “del Sol” México-Acapulco, declaró que durante su responsabilidad, metería en cintura a ese tipo de transporte que tanto daño le ha causado a los mexicanos en esas vías rápidas.

No sólo no lo logró antes de fallecer, sino que se ha mostrado a un sector autotransportista capaz de amagar al Gobierno Federal y a los ciudadanos con encarecer los costos del abasto de los insumos que transportan, si a caso se llega a limitar la envergadura de ese tipo de unidades, por cierto, prohibidas en las carreteras de los Estados Unidos de América y algunos caminos estatales de nuestro propio país que han aprobado algunos congresos locales, aun cuando no sea suficiente para desterrarlos en su paso por esos territorios estatales cuando se trata de una vía federal, como suelen ser las autopistas que utilizan principalmente para cruzar de los puertos de embarque, marítimos, ferroviarios y aéreos a las grandes áreas comerciales de abasto en puntos como Guadalajara, Toluca, Monterrey o Ciudad de México principalmente.

Las consecuencias de la utilidad de ese chantaje social que le ha dado grandes utilidades a estos transportistas que utilizan los doble remolques, han sido ampliamente documentadas por entidades como el Instituto Mexicano del Transporte (IMT) en cuyo anuario estadístico de accidentes en carreteras federales (2019) se detalla que …”1,514 camiones unitarios se vieron implicados en accidentes, éstos son el 7.7% del tortal de unidades. El documento señala que los camiones unitarios fueron responsables del 57% de estos hechos, provocando 414 personas heridas y 159 fallecidos en el lugar. Por otro lado el IMT revela que 2,346 vehículos de carga articulados se involucraron incidentes de este tipo, 11.9% del total a nivel nacional”.

Sin embargo las cifras más impactantes son las que señalan que, sólo en ese año 2019, causaron lesiones a 548 personas y la muerte a 286 en los cuales un transporte doble articulado estuvo involucrado en 844 accidentes por lo que el propio IMT calculó su responsabilidad en el 66% de los accidentes en los que participaron.

Sin duda, un sistema de transporte de mercancías terrorífico.

* Académico del CUAAD