/ martes 13 de agosto de 2019

Santa Cena, tiempo de libertad

El día de hoy, miércoles 14 de agosto de 2019, en la colonia Hermosa Provincia y demás subsedes de la Santa Convocación 2019, se realizará la Santa Cena, la ceremonia principal de la concentración multitudinaria de la Iglesia del Dios Vivo, Columna y Apoyo de la Verdad La Luz del Mundo, que en esta ocasión reunió en la ciudad de Guadalajara a más de 600 mil delegados procedentes de 58 países del mundo, una cifra récord en la historia de las santas cenas celebradas en esta ciudad.

"La Cena del Señor", como se denomina también a esta celebración anual, es un evento preponderante no sólo en el plano religioso, sino también social y culturalmente. Los habitantes de la Perla de Occidente, con excepción clara de aquellas personas que creen que sus creencias religiosas son las únicas válidas, esperan esta celebración por la derrama económica de 300 millones de dólares en beneficio de la ciudad, y por la proyección que la festividad le da a la imagen de Guadalajara a nivel internacional.

Por la ceremonia religiosa que se efectuará la tarde-noche de hoy, la Santa Cena ha sido ansiosamente esperada por cientos de miles de hombres y mujeres que han viajado a esta ciudad bajo el impulso de su fe, así como por la mayoría ausente, independientemente de que por las circunstancias actuales no vaya a estar presente en lo físico el apóstol de Jesucristo Naasón Joaquín García, presidente internacional de esta asociación religiosa.

Lo que no estará ausente en la conmemoración será la autoridad apostólica, misma que proporcionará a los asistentes perdón de pecados. Como en anteriores ediciones, esta autoridad bendecirá el pan y el vino, elementos que tras la bendición apostólica representarán el cuerpo y la sangre de Cristo, y se traducirán en fortaleza espiritual para más de cinco millones de fieles en los cinco continentes.

En su carta de invitación, fechada el pasado 13 de julio, el apóstol de Jesucristo habló sobre su libertad para estar con Dios y estar siempre con su pueblo. A continuación sus palabras que siguen siendo de gran aliento para la Iglesia: ¡Pero mi espíritu es libre para estar con nuestro Dios! ¡Libre para seguir conservando la unión con el pueblo de Dios! ¡Para estar siempre entre vosotros!

Será esa autoridad libre la que servirá a Jesucristo y a su Iglesia en el desarrollo de la Santa Cena, tal como lo expresó el Apóstol Naasón Joaquín en su carta apostólica del 29 de julio de 2019: “Ni las paredes ni las rejas impiden que yo siga sirviéndole y amándolo; nada ni nadie detiene mi amor a mi Señor Jesucristo”.

Con la autoridad apostólica presente y activa en la fiesta más grande de toda la tierra, la noche de hoy promete ser un tiempo de felicidad que trascenderá las fronteras y llegará a todos los países que han sido conquistados por el poder del evangelio. Será también un tiempo de libertad por el logro de esa autoridad, un tiempo en que las cadenas que esclavizan serán rotas, descorridos los cerrojos de las mazmorras, y abiertas las puertas herméticamente cerradas.

La libertad espiritual que se obtiene mediante la autoridad apostólica convertirá la tarde de hoy en un tiempo de alabanza; un tiempo en que los orfeones estatales y nacionales adorarán a Dios en el servicio de adoración más concurrido y especial del año. Participarán en el mismo, intérpretes de cánticos procedentes de diversas naciones del mundo, quienes alabarán con gratitud a Dios y a su Hijo Jesucristo, el Ser que hace cerca de 2 mil años derramó su sangre en el madero de la cruz, y quien ordenó recordar su sacrificio redentor con la celebración de este memorial sagrado.

Es importante señalar que el júbilo desbordante de este día no lo producen los orfeones ni la reunión multitudinaria que tendrá lugar la tarde de hoy en las sedes del evento, tampoco la decoración con que el Ministerio del Ceremonial vistió el esplendoroso templo sede internacional de la Iglesia La Luz del Mundo, sino esa paz espiritual que la oración de misericordia proporciona a los creyentes.

En la Santa Cena de este día concurrirán recuerdos y remembranzas de una vida fascinante: la vida ejemplar de Jesucristo, quien llevó a cabo el sacrificio que logró la redención de los seres humanos y la transformación de vida de quienes ponen su fe en él. Concurrirán también en la solemnidad vivencias, ya que Jesucristo, el príncipe de Dios, no sólo será recordado, sino que también estará sentado a la mesa, impartiendo bendiciones a diestra y siniestra, todo en respuesta a la oración apostólica.

Y es que la solemnidad de este día, más que remontarse al pasado distante, es la fiesta del ahora, en donde no sólo se evoca la redención obtenida a través de la sangre de Cristo, sino que se disfruta también de su presencia y bendiciones.


Twitter: @armayacastro

El día de hoy, miércoles 14 de agosto de 2019, en la colonia Hermosa Provincia y demás subsedes de la Santa Convocación 2019, se realizará la Santa Cena, la ceremonia principal de la concentración multitudinaria de la Iglesia del Dios Vivo, Columna y Apoyo de la Verdad La Luz del Mundo, que en esta ocasión reunió en la ciudad de Guadalajara a más de 600 mil delegados procedentes de 58 países del mundo, una cifra récord en la historia de las santas cenas celebradas en esta ciudad.

"La Cena del Señor", como se denomina también a esta celebración anual, es un evento preponderante no sólo en el plano religioso, sino también social y culturalmente. Los habitantes de la Perla de Occidente, con excepción clara de aquellas personas que creen que sus creencias religiosas son las únicas válidas, esperan esta celebración por la derrama económica de 300 millones de dólares en beneficio de la ciudad, y por la proyección que la festividad le da a la imagen de Guadalajara a nivel internacional.

Por la ceremonia religiosa que se efectuará la tarde-noche de hoy, la Santa Cena ha sido ansiosamente esperada por cientos de miles de hombres y mujeres que han viajado a esta ciudad bajo el impulso de su fe, así como por la mayoría ausente, independientemente de que por las circunstancias actuales no vaya a estar presente en lo físico el apóstol de Jesucristo Naasón Joaquín García, presidente internacional de esta asociación religiosa.

Lo que no estará ausente en la conmemoración será la autoridad apostólica, misma que proporcionará a los asistentes perdón de pecados. Como en anteriores ediciones, esta autoridad bendecirá el pan y el vino, elementos que tras la bendición apostólica representarán el cuerpo y la sangre de Cristo, y se traducirán en fortaleza espiritual para más de cinco millones de fieles en los cinco continentes.

En su carta de invitación, fechada el pasado 13 de julio, el apóstol de Jesucristo habló sobre su libertad para estar con Dios y estar siempre con su pueblo. A continuación sus palabras que siguen siendo de gran aliento para la Iglesia: ¡Pero mi espíritu es libre para estar con nuestro Dios! ¡Libre para seguir conservando la unión con el pueblo de Dios! ¡Para estar siempre entre vosotros!

Será esa autoridad libre la que servirá a Jesucristo y a su Iglesia en el desarrollo de la Santa Cena, tal como lo expresó el Apóstol Naasón Joaquín en su carta apostólica del 29 de julio de 2019: “Ni las paredes ni las rejas impiden que yo siga sirviéndole y amándolo; nada ni nadie detiene mi amor a mi Señor Jesucristo”.

Con la autoridad apostólica presente y activa en la fiesta más grande de toda la tierra, la noche de hoy promete ser un tiempo de felicidad que trascenderá las fronteras y llegará a todos los países que han sido conquistados por el poder del evangelio. Será también un tiempo de libertad por el logro de esa autoridad, un tiempo en que las cadenas que esclavizan serán rotas, descorridos los cerrojos de las mazmorras, y abiertas las puertas herméticamente cerradas.

La libertad espiritual que se obtiene mediante la autoridad apostólica convertirá la tarde de hoy en un tiempo de alabanza; un tiempo en que los orfeones estatales y nacionales adorarán a Dios en el servicio de adoración más concurrido y especial del año. Participarán en el mismo, intérpretes de cánticos procedentes de diversas naciones del mundo, quienes alabarán con gratitud a Dios y a su Hijo Jesucristo, el Ser que hace cerca de 2 mil años derramó su sangre en el madero de la cruz, y quien ordenó recordar su sacrificio redentor con la celebración de este memorial sagrado.

Es importante señalar que el júbilo desbordante de este día no lo producen los orfeones ni la reunión multitudinaria que tendrá lugar la tarde de hoy en las sedes del evento, tampoco la decoración con que el Ministerio del Ceremonial vistió el esplendoroso templo sede internacional de la Iglesia La Luz del Mundo, sino esa paz espiritual que la oración de misericordia proporciona a los creyentes.

En la Santa Cena de este día concurrirán recuerdos y remembranzas de una vida fascinante: la vida ejemplar de Jesucristo, quien llevó a cabo el sacrificio que logró la redención de los seres humanos y la transformación de vida de quienes ponen su fe en él. Concurrirán también en la solemnidad vivencias, ya que Jesucristo, el príncipe de Dios, no sólo será recordado, sino que también estará sentado a la mesa, impartiendo bendiciones a diestra y siniestra, todo en respuesta a la oración apostólica.

Y es que la solemnidad de este día, más que remontarse al pasado distante, es la fiesta del ahora, en donde no sólo se evoca la redención obtenida a través de la sangre de Cristo, sino que se disfruta también de su presencia y bendiciones.


Twitter: @armayacastro