/ sábado 30 de marzo de 2019

Precariedad en la vivienda masiva de Guadalajara

Sin garantizar el agua se encuentran los múltiples fraccionamientos marginales en las áreas periféricas de los municipios conurbados del Área Metropolitana de Guadalajara, de entre los cuales el más penoso, sin duda, resulta Tlajomulco de Zúñiga, cuyos problemas relativos a la falta de planeación, la inversión inmobiliaria hambreadora combinada con la corrupción en los funcionarios municipales corruptos, omisos o cómplices de éste círculo de la degradación urbana en la cual existe responsabilidad de los tres niveles de gobierno.

Por su parte, el Infonavit como la institución federal que presume el importante crecimiento del país en materia de inversión pública para el financiamiento de vivienda popular, no se atreve a reconocer, en el fenómeno del abandono de millones de viviendas en el territorio nacional, como un producto de la nula pertinencia en la publicitada aparición de fraccionamientos sin conectividad, aislados, sin centros escolares, ni vigilancia, parques, banquetas, señalización preventiva y el necesario transporte público decoroso, y en su lugar sí una constante y estridente publicidad engañosa que ofrece a muy bajo costo una nueva vida de confort; con nombres atractivos de fraccionamientos que ofertan un espejismo en realidad inconstitucional y subterráneo pero aleccionador sólo cuando un empleado se ve rodeado de inseguridad, soledad urbana y una deuda que no parece tener posibilidad de terminarse, cuando los miles de empleados poco han podido hacer para contener la impagable deuda ante el INFONAVIT.

Las escenas de la degradación en estos fraccionamientos por supuesto no aparecen en su publicidad y hoy presentan en lugar de banquetas, lozas de cemento levantadas o ausentes y con escombro convertidas en virtuales trampas para los peatones en el día a día de la parte abandonada en nuestra ciudad.

No obstante, los problemas visibles no se comparan con la inminente falta de agua amenazante en esos municipios y colonias marginadas y cuya problemática ha sido identificada como una constante en las ciudades mas pobladas de nuestro país. Las cuales han sido identificadas en nuestro país y serán analizadas en los diversos foros hídricos que seguirán realizando diversas organizaciones civiles, colegios de profesionistas y, en el Estado de Jalisco, académicos de la Universidad de Guadalajara.

La denominación peyorativa de las viviendas “huevito”, hoy representadas por dos de cada tres viviendas en venta en Jalisco, de acuerdo a la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI) llega a solucionarse en una superficie menor a los 60 metros cuadrados, que no representa el mayor problema de la vivienda en el contexto urbano actual, sino la carencia de todos los servicios urbanos y civilizatorios hoy presentes en países donde esa misma área habitacional conlleva un nivel y calidad de vida muy superior al de México. El mismo diseño que fue impulsado por el Arq. Walter Gropius en el Primer congreso Internacional de Arquitectos, en el lejano 1919 en Frankfort, forma parte de las entidades urbanas de ciudades arboladas y equipadas del mas alto nivel tecnológico urbano y del transporte así como una vida comunitaria socialmente integrada a la cultura, la educación, el consumo, la recreación y la salud. Países devastados en las guerras cíclicas hoy tienen urbanizaciones envidiables como Berlín, París, Londres y Varsovia.


Académico del CUAAD. Universidad de Guadalajara

carlosm_orozco@hotmail.com

Sin garantizar el agua se encuentran los múltiples fraccionamientos marginales en las áreas periféricas de los municipios conurbados del Área Metropolitana de Guadalajara, de entre los cuales el más penoso, sin duda, resulta Tlajomulco de Zúñiga, cuyos problemas relativos a la falta de planeación, la inversión inmobiliaria hambreadora combinada con la corrupción en los funcionarios municipales corruptos, omisos o cómplices de éste círculo de la degradación urbana en la cual existe responsabilidad de los tres niveles de gobierno.

Por su parte, el Infonavit como la institución federal que presume el importante crecimiento del país en materia de inversión pública para el financiamiento de vivienda popular, no se atreve a reconocer, en el fenómeno del abandono de millones de viviendas en el territorio nacional, como un producto de la nula pertinencia en la publicitada aparición de fraccionamientos sin conectividad, aislados, sin centros escolares, ni vigilancia, parques, banquetas, señalización preventiva y el necesario transporte público decoroso, y en su lugar sí una constante y estridente publicidad engañosa que ofrece a muy bajo costo una nueva vida de confort; con nombres atractivos de fraccionamientos que ofertan un espejismo en realidad inconstitucional y subterráneo pero aleccionador sólo cuando un empleado se ve rodeado de inseguridad, soledad urbana y una deuda que no parece tener posibilidad de terminarse, cuando los miles de empleados poco han podido hacer para contener la impagable deuda ante el INFONAVIT.

Las escenas de la degradación en estos fraccionamientos por supuesto no aparecen en su publicidad y hoy presentan en lugar de banquetas, lozas de cemento levantadas o ausentes y con escombro convertidas en virtuales trampas para los peatones en el día a día de la parte abandonada en nuestra ciudad.

No obstante, los problemas visibles no se comparan con la inminente falta de agua amenazante en esos municipios y colonias marginadas y cuya problemática ha sido identificada como una constante en las ciudades mas pobladas de nuestro país. Las cuales han sido identificadas en nuestro país y serán analizadas en los diversos foros hídricos que seguirán realizando diversas organizaciones civiles, colegios de profesionistas y, en el Estado de Jalisco, académicos de la Universidad de Guadalajara.

La denominación peyorativa de las viviendas “huevito”, hoy representadas por dos de cada tres viviendas en venta en Jalisco, de acuerdo a la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI) llega a solucionarse en una superficie menor a los 60 metros cuadrados, que no representa el mayor problema de la vivienda en el contexto urbano actual, sino la carencia de todos los servicios urbanos y civilizatorios hoy presentes en países donde esa misma área habitacional conlleva un nivel y calidad de vida muy superior al de México. El mismo diseño que fue impulsado por el Arq. Walter Gropius en el Primer congreso Internacional de Arquitectos, en el lejano 1919 en Frankfort, forma parte de las entidades urbanas de ciudades arboladas y equipadas del mas alto nivel tecnológico urbano y del transporte así como una vida comunitaria socialmente integrada a la cultura, la educación, el consumo, la recreación y la salud. Países devastados en las guerras cíclicas hoy tienen urbanizaciones envidiables como Berlín, París, Londres y Varsovia.


Académico del CUAAD. Universidad de Guadalajara

carlosm_orozco@hotmail.com