/ jueves 18 de febrero de 2021

¿Porqué aquí no?

Abel Campirano Marin

Mi entrega semanal al OCCIDENTAL, la he intitulado ¿Porqué aquí no? Es una pregunta que tiene respuesta simple: ¡Porque aquí es México!

Me explico. En Estados Unidos, el Presidente de Seguridad Nacional de la Cámara Baja, el Demócrata Bennie Thompson, ha demandado al Expresidente Donald Trump porque incitó a sus seguidores a hacer la intrusión al Capitolio, con el objeto de evitar que el Congreso norteamericano certificara la validez de los resultados de los procesos electorales que llevaron a Joe Biden a la Presidencia. Lo acusa de conspiración y busca medidas punitivas que incluyen la compensación por daños y lo va a lograr tarde o temprano, al igual que los órganos persecutores de los impuestos que debe el exmandatario.

Aquí, hasta una consulta nacional se organizó para enjuiciar a los expresidentes Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña. No pasó a mayores; hasta ahora no se sabe de alguna demanda que haya prosperado o al menos se haya intentado y lo que fueron buenas intenciones solo quedaron en eso.

En Estados Unidos, el presidente Joseph Biden declaró que estaba enfadado de que se esté hablando de Donald Trump. Invita al olvido del asunto y a hablar en lo sucesivo como tema fundamental de interés el pueblo de Estados Unidos.

Aquí en México, López Obrador una mañana sí y a la siguiente también y así, todas las mañanas, desde su Tribuna ha estado repitiendo culpas de todo a gobiernos anteriores, neoliberales y prensa fifí. De ahí no pasa, no hay sanciones contra los causantes de los daños y todo se resume en una forma de adoctrinamiento ideológico a la masa.

En Perú, la Fiscalía acaba de tomar declaraciones del Expresidente Martín Vizcarra, de su es posa y varios miembros de su gabinete como parte de una investigación tras revelarse que se vacunaron en secreto antes de que empezara la campaña de inoculación contra el Covid19 en las tierras de Atahualpa Yupanqui.

Aquí, algunos servidores de la nación (que se sirven de la Nación y ni la sirven ni sirven) junto con una sarta de aprovechados se saltaron el orden de las vacunas para anticiparse al resto de la población necesitada, y salvo uno que otro que no tenía mejores relaciones, el resto se ufanaron incluso en redes sociales de su primitivo proceder, sin que les trajera mayores consecuencias. Se burlan de los demás, sin consecuencia alguna a la bajeza de sus actos.

Mientras en otros países se diseñan planes de rescate de aerolíneas por ser una fuente de ingresos por la transportación del turismo recreativo, vacacional, de negocios y médico, aquí en México dejamos morir a la primer Compañía de Aviación, la inolvidable Mexicana de Aviación; Interjet está a punto de desaparecer con su flota en tierra y con un enorme problema de pilotos, sobrecargos, mecánicos y empleados en general y Aeroméxico con pérdidas en el cuarto trimestre de 2020 por más de 9 mil millones de pesos y tambaleándose por sobrevivir.

En otras naciones donde se organizan rifas, se entregan los premios. Aquí, se rifa el avión Presidencial, se pasa charola a los empresarios; el Gobierno lo rifa, se queda con él, se queda con el dinero, ¡se queda con las aportaciones de los incautos empresarios y se anuncia que ahí viene de nuevo la rifa del avión! Mientras, el famoso avión sigue en poder del gobierno, nunca tuvo un ganador y nos sigue generando gastos de mantenimiento y se sigue pagando y ni siquiera se usa para traer vacunas.

En otras naciones se imponen medidas de control y prevención sanitaria para el manejo de la Pandemia.

Aquí en México, ¡Se Prohíbe Prohibir! Que cada uno haga lo que quiera, ya están grandecitos y no ocupan del Gobierno que no es pilmama de nadie.

En otros países se castiga a los delincuentes y aquí se les ofrecen abrazos y se les advierte de acusarlos con las abuelas si se siguen portando mal.

Aquí no hay orden, no hay disciplina, no castigo a la delincuencia, siguen feminicidios, violencia de género, secuestros, asesinatos, apagones, carestía, desabasto de medicinas, desorden en la ministración y compra de vacunas, ocultamiento de datos de su adquisición, ocultamiento de datos verídicos sobre la pandemia, falta de transparencia, y tantas otras barbaridades. ¿Porqué? Simple: Porqué aquí es México.

No faltarán quienes digan. Pues si el articulista no está conforme, que se vaya de aquí. Pues yo les responderé: pues que se vayan y muy lejos, ellos y los que mal saben gobernar.

¿Porqué? Porque éste es México, porque ésta es mi Patria y yo sí la quiero y no me gusta que me la traten mal.

Abel Campirano Marin

Mi entrega semanal al OCCIDENTAL, la he intitulado ¿Porqué aquí no? Es una pregunta que tiene respuesta simple: ¡Porque aquí es México!

Me explico. En Estados Unidos, el Presidente de Seguridad Nacional de la Cámara Baja, el Demócrata Bennie Thompson, ha demandado al Expresidente Donald Trump porque incitó a sus seguidores a hacer la intrusión al Capitolio, con el objeto de evitar que el Congreso norteamericano certificara la validez de los resultados de los procesos electorales que llevaron a Joe Biden a la Presidencia. Lo acusa de conspiración y busca medidas punitivas que incluyen la compensación por daños y lo va a lograr tarde o temprano, al igual que los órganos persecutores de los impuestos que debe el exmandatario.

Aquí, hasta una consulta nacional se organizó para enjuiciar a los expresidentes Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña. No pasó a mayores; hasta ahora no se sabe de alguna demanda que haya prosperado o al menos se haya intentado y lo que fueron buenas intenciones solo quedaron en eso.

En Estados Unidos, el presidente Joseph Biden declaró que estaba enfadado de que se esté hablando de Donald Trump. Invita al olvido del asunto y a hablar en lo sucesivo como tema fundamental de interés el pueblo de Estados Unidos.

Aquí en México, López Obrador una mañana sí y a la siguiente también y así, todas las mañanas, desde su Tribuna ha estado repitiendo culpas de todo a gobiernos anteriores, neoliberales y prensa fifí. De ahí no pasa, no hay sanciones contra los causantes de los daños y todo se resume en una forma de adoctrinamiento ideológico a la masa.

En Perú, la Fiscalía acaba de tomar declaraciones del Expresidente Martín Vizcarra, de su es posa y varios miembros de su gabinete como parte de una investigación tras revelarse que se vacunaron en secreto antes de que empezara la campaña de inoculación contra el Covid19 en las tierras de Atahualpa Yupanqui.

Aquí, algunos servidores de la nación (que se sirven de la Nación y ni la sirven ni sirven) junto con una sarta de aprovechados se saltaron el orden de las vacunas para anticiparse al resto de la población necesitada, y salvo uno que otro que no tenía mejores relaciones, el resto se ufanaron incluso en redes sociales de su primitivo proceder, sin que les trajera mayores consecuencias. Se burlan de los demás, sin consecuencia alguna a la bajeza de sus actos.

Mientras en otros países se diseñan planes de rescate de aerolíneas por ser una fuente de ingresos por la transportación del turismo recreativo, vacacional, de negocios y médico, aquí en México dejamos morir a la primer Compañía de Aviación, la inolvidable Mexicana de Aviación; Interjet está a punto de desaparecer con su flota en tierra y con un enorme problema de pilotos, sobrecargos, mecánicos y empleados en general y Aeroméxico con pérdidas en el cuarto trimestre de 2020 por más de 9 mil millones de pesos y tambaleándose por sobrevivir.

En otras naciones donde se organizan rifas, se entregan los premios. Aquí, se rifa el avión Presidencial, se pasa charola a los empresarios; el Gobierno lo rifa, se queda con él, se queda con el dinero, ¡se queda con las aportaciones de los incautos empresarios y se anuncia que ahí viene de nuevo la rifa del avión! Mientras, el famoso avión sigue en poder del gobierno, nunca tuvo un ganador y nos sigue generando gastos de mantenimiento y se sigue pagando y ni siquiera se usa para traer vacunas.

En otras naciones se imponen medidas de control y prevención sanitaria para el manejo de la Pandemia.

Aquí en México, ¡Se Prohíbe Prohibir! Que cada uno haga lo que quiera, ya están grandecitos y no ocupan del Gobierno que no es pilmama de nadie.

En otros países se castiga a los delincuentes y aquí se les ofrecen abrazos y se les advierte de acusarlos con las abuelas si se siguen portando mal.

Aquí no hay orden, no hay disciplina, no castigo a la delincuencia, siguen feminicidios, violencia de género, secuestros, asesinatos, apagones, carestía, desabasto de medicinas, desorden en la ministración y compra de vacunas, ocultamiento de datos de su adquisición, ocultamiento de datos verídicos sobre la pandemia, falta de transparencia, y tantas otras barbaridades. ¿Porqué? Simple: Porqué aquí es México.

No faltarán quienes digan. Pues si el articulista no está conforme, que se vaya de aquí. Pues yo les responderé: pues que se vayan y muy lejos, ellos y los que mal saben gobernar.

¿Porqué? Porque éste es México, porque ésta es mi Patria y yo sí la quiero y no me gusta que me la traten mal.