Eduardo Sadot-Morales Figueroa
PRD y Morena en breve entrarán en la dinámica de nombrar a un presidente que les dirija. El PRI ya esta en el proceso de selección de su presidente, la incógnita es si es un partido en busca de un presidente o es un presidente en busca de un Partido.
La Unidad Revolucionaria del PRI, que incluye a militares que simpatizan o participan como militantes en el PRI la preside el General retirado Fausto Samuel Zamorano Esparza, quien Convocó a las tres fórmulas de candidatos registradas, para el viernes 26 a las 19 horas en el Auditorio Heriberto Jara. En el evento habrían de exponer sus proyectos. El orden original disponía que comenzara, Lorena Piñón y Daniel Santos después Alejandro Moreno y Carolina Viggiano y finalizaran Ivonne Ortega y José Alfaro. Finalmente hubo movimientos por el clima y comenzó la fórmula de Alejandro Moreno, después Lorena Piñón y para el sábado 27 quedó la fórmula de Ivonne Ortega y José Encarnación Alfaro. Sin embargo previo al evento se modificó la fecha lo que provocó el reclamo de Invonne Ortega y José Alfaro obteniendo el respaldo de la Comisión Nacional de Procesos internos del PRI.
Llama la atención que tratándose de un tema trascendente para el PRI como es el cambio de dirigencia nacional, no hayan despertado el interés entre la militancia – si es que aún queda algo – para asistir a escucharlos y menos al universo de electores.
Una realidad es que los últimos años estuvo a la disposición de la cúpula, como siempre ha sido, el desencanto entre militantes, simpatizantes y electores en general ha provocado que ahora militen o voten por otros partidos.
En las candidaturas se observan signos de desaliento, incluso entre los mismos candidatos, que presentan una imagen de entusiasmo, la realidad tristemente es otra. Poca militancia y menos entusiasmo.
Preocupa el futuro del PRI y de los candidatos a presidirlo, de las tres fórmulas solo triunfará una, que va a suceder con los que pierdan, lo aceptarán, si han dado señales de inconformidad, se han lanzado acusaciones de tener padrinazgos, dentro y fuera. Que si tienen ya negociada su salida y el camino pavimentado para llegar por la puerta grande a otro proyecto político, mientras la militancia – la que queda – expectante.
Luego definirse la presidencia, el PRI tiene dos caminos, construir una candidatura a la presidencia viable o reconstruirse y reinventarse para ocupar el espacio crítico, que ha dejado libre el actual presidente Obrador, sumarse con todos los partidos que quedan o que queden, para ganarle a Morena pero en ese trabajo, el gobierno actual opera para que surjan muchos partiditos como está sucediendo que le garanticen en la pulverización de las fuerzas electorales seguir gobernando, la suma del PAN, PRD, PRI y Nueva Alianza le ganan a Morena, pero quien sería el candidato, ese es el gran dilema, hay quienes dicen que debe ser una mujer ahora, si no es presidente Ivonne, puede ser candidata, otros dicen que para ganarle a Morena solo un moreno, joven y combativo, en lo que queda de Acción Nacional, no se ponen de acuerdo, en el PRD el visible y fuerte sigue siendo Miguel Ángel Mancera, pero en Movimiento Ciudadano está el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, a quien por lo mismo ahora, le hacen pasar una prueba de acido, sujeto a fuego amigo, traiciones y torpezas en su propio equipo, pero apenas es el principio, lo que no mata fortalece.
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