/ miércoles 29 de diciembre de 2021

La vía se llama Movimiento Ciudadano

Iván Chávez Gómez


Ante el autoritarismo cada vez más notorio de la llamada Cuarta Transformación, y ante el viejo partidismo –hoy de oposición- que por años sangró México, la única opción para reencauzar el rumbo de la nación está compuesta de dos palabras: Movimiento Ciudadano.

Por estos días, hace un año –me lo recordó Facebook en un recuerdo de 2020- iniciaba el proceso interno de MC para elegir los mejores perfiles que nos representarían en las urnas en las elecciones intermedias de 2021.

Nuestra apuesta, la planteó desde el inicio nuestro entonces coordinador nacional, el senador Clemente Castañeda, era hacer mancuerna con mujeres y hombres libres: “México puede dejar atrás el pasado encarnado por la alianza PRI-PAN-PRD y el pasado que desde el poder impulsan Morena y sus aliados. Con Movimiento Ciudadano, hay una tercera vía para construir futuro”, fueron sus palabras.

Frente a todos los pronósticos y ante las voces que aseguraban que ir solos -sin una alianza con los partidos de antaño que gozan de estructuras clientelares muy bien aceitadas- era darse un tiro en el pie, Movimiento Ciudadano fue firme en sus convicciones y los resultados superaron nuestras propias expectativas.

Optamos por un compromiso serio, transparente y confiable con ciudadanas y ciudadanos quienes creen que un México sin división y polarización es posible; aquellas personas convencidas que el país necesita un cambio de timón ante las decisiones erróneas que se toman desde Palacio Nacional.

Creímos en nuestra autonomía y soberanía como entidad federativa, y echamos a andar una campaña cuyo slogan “Defendamos Jalisco” hizo eco en quienes ven en la 4T una amenaza a las libertades y derechos que se ganaron a lo largo de años de luchas sociales contra un viejo régimen que pareciera que al día de hoy, solo ha cambiado de cascarón.

Nuestra propuesta de gobierno, más los buenos resultados que las administraciones públicas emanadas de Movimiento Ciudadano han tenido en Guadalajara, Zapopan y Jalisco, fue atractiva en otras latitudes de la República Mexicana.

En 2021, bajo las siglas de MC, Samuel García ganó la gubernatura de Nuevo León con el 36.68 por ciento de la votación, casi 10 puntos más que su más próximo contrincante, el priista Adrián de la Garza, quien entonces había sido alcalde de Monterrey.

No solo eso, Luis Donaldo Colosio, también candidato emecista, se alzó con el triunfo en la capital de esa entidad con el 47 por ciento de los votos emitidos en junio pasado.

En Jalisco, Movimiento Ciudadano rompió con esa vieja tradición de las elecciones intermedias en las que el partido en el poder sufre un descalabro significativo. Y este 2021 retuvimos los municipios metropolitanos de Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco y Tlaquepaque, aun cuando en este último, Morena se valió de artimañas para que se repitiera la elección.

Solo en Zapopan, hicimos una campaña basada en la honestidad, el trabajo y la experiencia de Juan José Frangie, quien ganó en las urnas con más de dos dígitos de diferencia ante el segundo lugar. Y en Guadalajara, Pablo Lemus arrasó con una ventaja de casi 80 mil votos sobre el candidato morenista.

Movimiento Ciudadano gobierna hoy tres de los cinco municipios con mayor presupuesto en todo el país: Guadalajara, Zapopan y Monterrey. Juntos suman más de 20 mil millones de pesos, recursos que sin duda se verán reflejados en obra pública, inversión, seguridad, empleo e infraestructura social.

De cara a 2022, cuando estarán en juego las gubernaturas de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, vale la pena retomar la directriz principal que ha caracterizado a las administraciones de Pablo Lemus: poner al ser humano al centro de las decisiones de gobierno para lograr una mejor ciudad, un mejor estado y un mejor México.

* Coordinador de regidores de MC de Zapopan

Iván Chávez Gómez


Ante el autoritarismo cada vez más notorio de la llamada Cuarta Transformación, y ante el viejo partidismo –hoy de oposición- que por años sangró México, la única opción para reencauzar el rumbo de la nación está compuesta de dos palabras: Movimiento Ciudadano.

Por estos días, hace un año –me lo recordó Facebook en un recuerdo de 2020- iniciaba el proceso interno de MC para elegir los mejores perfiles que nos representarían en las urnas en las elecciones intermedias de 2021.

Nuestra apuesta, la planteó desde el inicio nuestro entonces coordinador nacional, el senador Clemente Castañeda, era hacer mancuerna con mujeres y hombres libres: “México puede dejar atrás el pasado encarnado por la alianza PRI-PAN-PRD y el pasado que desde el poder impulsan Morena y sus aliados. Con Movimiento Ciudadano, hay una tercera vía para construir futuro”, fueron sus palabras.

Frente a todos los pronósticos y ante las voces que aseguraban que ir solos -sin una alianza con los partidos de antaño que gozan de estructuras clientelares muy bien aceitadas- era darse un tiro en el pie, Movimiento Ciudadano fue firme en sus convicciones y los resultados superaron nuestras propias expectativas.

Optamos por un compromiso serio, transparente y confiable con ciudadanas y ciudadanos quienes creen que un México sin división y polarización es posible; aquellas personas convencidas que el país necesita un cambio de timón ante las decisiones erróneas que se toman desde Palacio Nacional.

Creímos en nuestra autonomía y soberanía como entidad federativa, y echamos a andar una campaña cuyo slogan “Defendamos Jalisco” hizo eco en quienes ven en la 4T una amenaza a las libertades y derechos que se ganaron a lo largo de años de luchas sociales contra un viejo régimen que pareciera que al día de hoy, solo ha cambiado de cascarón.

Nuestra propuesta de gobierno, más los buenos resultados que las administraciones públicas emanadas de Movimiento Ciudadano han tenido en Guadalajara, Zapopan y Jalisco, fue atractiva en otras latitudes de la República Mexicana.

En 2021, bajo las siglas de MC, Samuel García ganó la gubernatura de Nuevo León con el 36.68 por ciento de la votación, casi 10 puntos más que su más próximo contrincante, el priista Adrián de la Garza, quien entonces había sido alcalde de Monterrey.

No solo eso, Luis Donaldo Colosio, también candidato emecista, se alzó con el triunfo en la capital de esa entidad con el 47 por ciento de los votos emitidos en junio pasado.

En Jalisco, Movimiento Ciudadano rompió con esa vieja tradición de las elecciones intermedias en las que el partido en el poder sufre un descalabro significativo. Y este 2021 retuvimos los municipios metropolitanos de Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco y Tlaquepaque, aun cuando en este último, Morena se valió de artimañas para que se repitiera la elección.

Solo en Zapopan, hicimos una campaña basada en la honestidad, el trabajo y la experiencia de Juan José Frangie, quien ganó en las urnas con más de dos dígitos de diferencia ante el segundo lugar. Y en Guadalajara, Pablo Lemus arrasó con una ventaja de casi 80 mil votos sobre el candidato morenista.

Movimiento Ciudadano gobierna hoy tres de los cinco municipios con mayor presupuesto en todo el país: Guadalajara, Zapopan y Monterrey. Juntos suman más de 20 mil millones de pesos, recursos que sin duda se verán reflejados en obra pública, inversión, seguridad, empleo e infraestructura social.

De cara a 2022, cuando estarán en juego las gubernaturas de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, vale la pena retomar la directriz principal que ha caracterizado a las administraciones de Pablo Lemus: poner al ser humano al centro de las decisiones de gobierno para lograr una mejor ciudad, un mejor estado y un mejor México.

* Coordinador de regidores de MC de Zapopan