/ jueves 23 de diciembre de 2021

La urgente Línea 4

El optimismo mostrado hace pocos días por el presidente municipal de Tlajomulco, Salvador Zamora Zamora, sobre la inminente construcción de la Línea 4 del Tren Eléctrico tan necesario para esa sobrepoblada región es compartida por todos los habitantes de Guadalajara que hoy padecemos el incontenible caos vial como consecuencia del crecimiento vehicular, la falta de un transporte masivo eficiente y la aparición de ciudades dormitorio como Tlajomulco y gran parte de otros municipios como Tonalá y El Salto.

Optimismo generado por ese deseo cívico de revertir las condiciones inequitativas en las que deben trasladarse al trabajo cientos de miles de habitantes de colonias proletarias que deben acudir a comercios, fábricas o Centros Universitarios, generalmente alejados de la región urbana donde pernoctan.

No obstante, como bien lo reconoce el Alcalde Zamora, dependerá mucho de la gestión por realizar con la iniciativa privada, el Gobierno de Jalisco y el Fondo Nacional de Infraestructura a cargo de Banobras y por lo tanto, del Gobierno de la República, ya que, de entrada, el costo del proyecto partió de los 10 mil millones de pesos a partir de ajustes técnicos para disminuir una obra estimada originalmente en 13 mil millones. Acerca de lo cual Zamora señaló a los medios que “…debemos hacer algunas adecuaciones, sobre todo en los pasos a desnivel, que serían similares a los que tiene la Línea 1 del tren Ligero en este momento”. Resulta idóneo lograr ese proyecto en el próximo año 2022 más si consideramos que aparte de la Línea 3 del Tren Eléctrico en Guadalajara, en nuestro estado pocas obras de impacto a la movilidad se han realizado en los pasados 30 años.

A la importancia en la consecución de esa Línea de 20 kilómetros para integrar al Área Metropolitana de Guadalajara a uno de los municipios con mayor número de poblados dispersos en el Estado, habría que agregar la expansión programada de la Universidad de Guadalajara al llegar a este municipio con uno de los Centros Universitarios más ambiciosos y que podría incluir infraestructura para la salud además de carreras médicas y el centro educativo más extenso y grande de la Red Universitaria, el cual pretende llegar a tener hasta 15 mil estudiantes de todos los municipios cercanos y de aquellas familias que aspiren acceder a la educación superior de calidad.

Así de importante podría ser esta Línea 4 sobre todo para los trabajadores que desperdician entre 2 y 4 horas diariamente sólo para trasladarse a sus centros de trabajo.

Es decir, la “gentrificación” marginal generada por hambreadores del concreto que convirtieron zonas agrícolas en fraccionamientos de bajo costo, podría significar una alternativa de vivienda de no ser por la inexistente conectividad entre decenas de poblados, inseguridad pública y falta de los servicios urbanos más elementales. Por lo cual una Línea de tren suburbano vendría a amainar las graves carencias que presenta Tlajomulco y que han sido acentuadas por malas decisiones en los últimos 30 años.

En este análisis, no incluyo la impresionante desigualdad entre zonas de alta plusvalía habitacional en el margen de la Avenida López Mateos Sur frente a colonias de muy alta densidad de población como Santa Fe y Arvento, también del municipio de Tlajomulco.

*Académico de la Universidad de Guadalajara

El optimismo mostrado hace pocos días por el presidente municipal de Tlajomulco, Salvador Zamora Zamora, sobre la inminente construcción de la Línea 4 del Tren Eléctrico tan necesario para esa sobrepoblada región es compartida por todos los habitantes de Guadalajara que hoy padecemos el incontenible caos vial como consecuencia del crecimiento vehicular, la falta de un transporte masivo eficiente y la aparición de ciudades dormitorio como Tlajomulco y gran parte de otros municipios como Tonalá y El Salto.

Optimismo generado por ese deseo cívico de revertir las condiciones inequitativas en las que deben trasladarse al trabajo cientos de miles de habitantes de colonias proletarias que deben acudir a comercios, fábricas o Centros Universitarios, generalmente alejados de la región urbana donde pernoctan.

No obstante, como bien lo reconoce el Alcalde Zamora, dependerá mucho de la gestión por realizar con la iniciativa privada, el Gobierno de Jalisco y el Fondo Nacional de Infraestructura a cargo de Banobras y por lo tanto, del Gobierno de la República, ya que, de entrada, el costo del proyecto partió de los 10 mil millones de pesos a partir de ajustes técnicos para disminuir una obra estimada originalmente en 13 mil millones. Acerca de lo cual Zamora señaló a los medios que “…debemos hacer algunas adecuaciones, sobre todo en los pasos a desnivel, que serían similares a los que tiene la Línea 1 del tren Ligero en este momento”. Resulta idóneo lograr ese proyecto en el próximo año 2022 más si consideramos que aparte de la Línea 3 del Tren Eléctrico en Guadalajara, en nuestro estado pocas obras de impacto a la movilidad se han realizado en los pasados 30 años.

A la importancia en la consecución de esa Línea de 20 kilómetros para integrar al Área Metropolitana de Guadalajara a uno de los municipios con mayor número de poblados dispersos en el Estado, habría que agregar la expansión programada de la Universidad de Guadalajara al llegar a este municipio con uno de los Centros Universitarios más ambiciosos y que podría incluir infraestructura para la salud además de carreras médicas y el centro educativo más extenso y grande de la Red Universitaria, el cual pretende llegar a tener hasta 15 mil estudiantes de todos los municipios cercanos y de aquellas familias que aspiren acceder a la educación superior de calidad.

Así de importante podría ser esta Línea 4 sobre todo para los trabajadores que desperdician entre 2 y 4 horas diariamente sólo para trasladarse a sus centros de trabajo.

Es decir, la “gentrificación” marginal generada por hambreadores del concreto que convirtieron zonas agrícolas en fraccionamientos de bajo costo, podría significar una alternativa de vivienda de no ser por la inexistente conectividad entre decenas de poblados, inseguridad pública y falta de los servicios urbanos más elementales. Por lo cual una Línea de tren suburbano vendría a amainar las graves carencias que presenta Tlajomulco y que han sido acentuadas por malas decisiones en los últimos 30 años.

En este análisis, no incluyo la impresionante desigualdad entre zonas de alta plusvalía habitacional en el margen de la Avenida López Mateos Sur frente a colonias de muy alta densidad de población como Santa Fe y Arvento, también del municipio de Tlajomulco.

*Académico de la Universidad de Guadalajara