/ martes 25 de febrero de 2020

La salud pública en México

La salud pública sigue siendo un tema novedoso, así lo marcan los diversos estudios de esta línea del conocimiento médico biológico en nuestro país, como lo demostró en los tiempos de su investigación científica el Doctor Javier García de Alba, como un tema de interés nacional, ya que sin salud este país compuesto por más de ciento treinta millones de habitantes no se movería, la misma se vincula con los derechos humanos para el desarrollo de esta nación.

Los hospitales públicos dentro del sistema de la salud pública nacional desempeñan un papel fundamental en la prevención, diagnóstico, tratamiento, intervención quirúrgica, rehabilitación y cura de las enfermedades que padecen los seres humanos que caminan, estudian y trabajan en territorio nacional.

Las admisiones y las consultas médicas en los hospitales públicos se encuentran en la mayor demanda de los necesitados y dolidos por la enfermedad que padecen; las camas hospitalarias se encuentran saturadas, donde las camillas, sillas, pasillos y sabanas suplen a las camas hospitalarias, llámese Instituto Mexicano del Seguro Social, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado,, Hospitales Civiles como el Fray Antonio Alcalde, también conocido como Hospital Civil Viejo, o el Hospital Juan I. Menchaca, también conocido como Hospital Civil Nuevo, así como el Hospital de Zoquipan, y otros más que se encuentran en el territorio de este Estado.

La carencia de medicinas es el principal problema que enfrentan los hospitales públicos, sus insumos se han agotado en los tratamientos médicos, los pacientes y sus familiares se ven en la necesidad de comprar sus medicinas en farmacias particulares, perdiendo el sentido de gratuidad en el proyecto de salud del gobierno federal como es el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), lo que si tenía en sus tratamientos médicos y quirúrgicos desde su fundación el Seguro Popular, que si bien era administrado por los Estados con un techo financiero federal en este renglón debemos de reconocer que cayó en el exceso que lo llevó a la corrupción, por lo que fue eliminado por el actual gobierno federal, generando inconformidad dentro de las familias de escasos recursos en las enfermedades llamadas de tercer nivel, a estos enfermos ante la falta de medicamentos, tratamientos quirúrgicos, trasplantes de órganos, diálisis, quimioterapias y otras más solo les espera un destino fatal ante los oídos sordos del gobierno federal.

Los que más sufren por esta política de salud pública son los niños enfermos de este país que se enfrentan a un futuro incierto y que la falta de tratamiento va en contra de la Constitución en su artículo cuarto; el Estado debe de cuidar, supervisar y vigilar el interés superior de la niñez para su desarrollo como ser humano desde la salud hasta la educación, lo que representa un respeto a sus derechos humanos que se están descuidando por la actual administración federal del gobierno de la República.

La salud de los mexicanos es y debe de ser la suprema ley, ya que sin salud no hay desarrollo nacional.

* Profesor de Derecho de la Universidad de Guadalajara

* Miembro fundador de la Asociación Nacional de Doctores en Derecho. Capítulo Jalisco.

antonio_dejesus@hotmail.com

twitter: @mendozaAntoio.

La salud pública sigue siendo un tema novedoso, así lo marcan los diversos estudios de esta línea del conocimiento médico biológico en nuestro país, como lo demostró en los tiempos de su investigación científica el Doctor Javier García de Alba, como un tema de interés nacional, ya que sin salud este país compuesto por más de ciento treinta millones de habitantes no se movería, la misma se vincula con los derechos humanos para el desarrollo de esta nación.

Los hospitales públicos dentro del sistema de la salud pública nacional desempeñan un papel fundamental en la prevención, diagnóstico, tratamiento, intervención quirúrgica, rehabilitación y cura de las enfermedades que padecen los seres humanos que caminan, estudian y trabajan en territorio nacional.

Las admisiones y las consultas médicas en los hospitales públicos se encuentran en la mayor demanda de los necesitados y dolidos por la enfermedad que padecen; las camas hospitalarias se encuentran saturadas, donde las camillas, sillas, pasillos y sabanas suplen a las camas hospitalarias, llámese Instituto Mexicano del Seguro Social, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado,, Hospitales Civiles como el Fray Antonio Alcalde, también conocido como Hospital Civil Viejo, o el Hospital Juan I. Menchaca, también conocido como Hospital Civil Nuevo, así como el Hospital de Zoquipan, y otros más que se encuentran en el territorio de este Estado.

La carencia de medicinas es el principal problema que enfrentan los hospitales públicos, sus insumos se han agotado en los tratamientos médicos, los pacientes y sus familiares se ven en la necesidad de comprar sus medicinas en farmacias particulares, perdiendo el sentido de gratuidad en el proyecto de salud del gobierno federal como es el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), lo que si tenía en sus tratamientos médicos y quirúrgicos desde su fundación el Seguro Popular, que si bien era administrado por los Estados con un techo financiero federal en este renglón debemos de reconocer que cayó en el exceso que lo llevó a la corrupción, por lo que fue eliminado por el actual gobierno federal, generando inconformidad dentro de las familias de escasos recursos en las enfermedades llamadas de tercer nivel, a estos enfermos ante la falta de medicamentos, tratamientos quirúrgicos, trasplantes de órganos, diálisis, quimioterapias y otras más solo les espera un destino fatal ante los oídos sordos del gobierno federal.

Los que más sufren por esta política de salud pública son los niños enfermos de este país que se enfrentan a un futuro incierto y que la falta de tratamiento va en contra de la Constitución en su artículo cuarto; el Estado debe de cuidar, supervisar y vigilar el interés superior de la niñez para su desarrollo como ser humano desde la salud hasta la educación, lo que representa un respeto a sus derechos humanos que se están descuidando por la actual administración federal del gobierno de la República.

La salud de los mexicanos es y debe de ser la suprema ley, ya que sin salud no hay desarrollo nacional.

* Profesor de Derecho de la Universidad de Guadalajara

* Miembro fundador de la Asociación Nacional de Doctores en Derecho. Capítulo Jalisco.

antonio_dejesus@hotmail.com

twitter: @mendozaAntoio.