/ martes 7 de abril de 2020

La Luz del Mundo

Ayer se cumplieron 94 años del llamamiento del maestro Aarón Joaquín González al apostolado, un ministerio que ejerció por voluntad divina por más de 38 años. En ese lapso, el apóstol oriundo de Colotlán, Jalisco, llevó el evangelio a varios estados de la República Mexicana, así como a otros países de Norte y Centroamérica, entre ellos Estados Unidos, El Salvador, Honduras y Costa Rica.

Al filo de las 5:00 horas de este lunes 6 de abril, el pastor doctor Ramiro Hernández López, por encomienda apostólica, recordó a los miembros de la Iglesia universal la vida y obra del hermano Aarón Joaquín, destacando en el desarrollo del tema (que los fieles de la Iglesia escucharon en sus hogares) la fe inquebrantable que habitó en el enviado de Dios desde el día de su llamamiento, un acontecimiento memorable que tuvo lugar el martes 6 de abril de 1926 en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.

Los logros del apóstol Aarón Joaquín, que gozan del reconocimiento de los fieles y ministros en todos los países donde esta asociación religiosa tiene presencia, fueron alcanzados en medio de un clima de discriminación e intolerancia religiosa, en donde el respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales era prácticamente inexistente.

Recordemos que cuando él empezó a predicar la doctrina revelada en Jalisco y otros estados de nuestro país, en 1926, la Declaración Universal de Derechos Humanos, que reconoce y afianza la libertad religiosa, aún no se había proclamado. Como usted bien sabe, la publicación de este importante documento tuvo lugar en el palacio Chaillot de París, Francia, el 10 de diciembre de 1948.

Cuando esta Declaración se aprobó y firmó, en medio de la oposición de los países que formaban el bloque socialista, el maestro Aarón Joaquín llevaba 22 años predicando los valores cristianos en medio de persecuciones protagonizadas “tanto por las autoridades civiles como por la Iglesia católica”, sostiene el doctor Luis Rodolfo Morán Quiroz en su libro Alternativa religiosa en Guadalajara: una aproximación al estudio de las iglesias evangélicas.

Hoy, a 94 años del inicio de la predicación del evangelio, y a pesar de la adversidad que ha tenido que afrontar en diferentes momentos de su historia, contemplamos a la Iglesia La Luz del Mundo más unida que nunca, proclamando y practicando sus valores, los mismos que predicó el apóstol Samuel Joaquín Flores en sus más de 50 años de apostolado, y los que actualmente difunde el apóstol Naasón Joaquín García, actual presidente internacional de esta Iglesia.

Me refiero a valores tales como la generosidad y solidaridad de los fieles de la Iglesia La Luz del Mundo, quienes bajo las directrices del Apóstol Naasón Joaquín han realizado una labor de apoyo ininterrumpido a las familias vulnerables en el actual contexto de emergencia sanitaria ocasionada por la pandemia de Covid-19.

Estas acciones generosas se están dando en respuesta al llamado que el apóstol de Jesucristo hiciera a la iglesia universal el pasado domingo 29 de marzo. De entonces a la fecha, se han repartido diariamente miles de despensas de alimentos en todas las ciudades y pueblos de los 60 países donde esta institución religiosa tiene presencia.

El llamado apostólico a la solidaridad se hizo extensivo a favor del personal médico que, en algunas instituciones de salud, está padeciendo por causa del desabasto en equipos médicos de protección, como son guantes, cubrebocas, mamelucos, caretas, etcétera.

Twitter: @armayacastro

Ayer se cumplieron 94 años del llamamiento del maestro Aarón Joaquín González al apostolado, un ministerio que ejerció por voluntad divina por más de 38 años. En ese lapso, el apóstol oriundo de Colotlán, Jalisco, llevó el evangelio a varios estados de la República Mexicana, así como a otros países de Norte y Centroamérica, entre ellos Estados Unidos, El Salvador, Honduras y Costa Rica.

Al filo de las 5:00 horas de este lunes 6 de abril, el pastor doctor Ramiro Hernández López, por encomienda apostólica, recordó a los miembros de la Iglesia universal la vida y obra del hermano Aarón Joaquín, destacando en el desarrollo del tema (que los fieles de la Iglesia escucharon en sus hogares) la fe inquebrantable que habitó en el enviado de Dios desde el día de su llamamiento, un acontecimiento memorable que tuvo lugar el martes 6 de abril de 1926 en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.

Los logros del apóstol Aarón Joaquín, que gozan del reconocimiento de los fieles y ministros en todos los países donde esta asociación religiosa tiene presencia, fueron alcanzados en medio de un clima de discriminación e intolerancia religiosa, en donde el respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales era prácticamente inexistente.

Recordemos que cuando él empezó a predicar la doctrina revelada en Jalisco y otros estados de nuestro país, en 1926, la Declaración Universal de Derechos Humanos, que reconoce y afianza la libertad religiosa, aún no se había proclamado. Como usted bien sabe, la publicación de este importante documento tuvo lugar en el palacio Chaillot de París, Francia, el 10 de diciembre de 1948.

Cuando esta Declaración se aprobó y firmó, en medio de la oposición de los países que formaban el bloque socialista, el maestro Aarón Joaquín llevaba 22 años predicando los valores cristianos en medio de persecuciones protagonizadas “tanto por las autoridades civiles como por la Iglesia católica”, sostiene el doctor Luis Rodolfo Morán Quiroz en su libro Alternativa religiosa en Guadalajara: una aproximación al estudio de las iglesias evangélicas.

Hoy, a 94 años del inicio de la predicación del evangelio, y a pesar de la adversidad que ha tenido que afrontar en diferentes momentos de su historia, contemplamos a la Iglesia La Luz del Mundo más unida que nunca, proclamando y practicando sus valores, los mismos que predicó el apóstol Samuel Joaquín Flores en sus más de 50 años de apostolado, y los que actualmente difunde el apóstol Naasón Joaquín García, actual presidente internacional de esta Iglesia.

Me refiero a valores tales como la generosidad y solidaridad de los fieles de la Iglesia La Luz del Mundo, quienes bajo las directrices del Apóstol Naasón Joaquín han realizado una labor de apoyo ininterrumpido a las familias vulnerables en el actual contexto de emergencia sanitaria ocasionada por la pandemia de Covid-19.

Estas acciones generosas se están dando en respuesta al llamado que el apóstol de Jesucristo hiciera a la iglesia universal el pasado domingo 29 de marzo. De entonces a la fecha, se han repartido diariamente miles de despensas de alimentos en todas las ciudades y pueblos de los 60 países donde esta institución religiosa tiene presencia.

El llamado apostólico a la solidaridad se hizo extensivo a favor del personal médico que, en algunas instituciones de salud, está padeciendo por causa del desabasto en equipos médicos de protección, como son guantes, cubrebocas, mamelucos, caretas, etcétera.

Twitter: @armayacastro