/ jueves 20 de mayo de 2021

La impunidad viaja en moto

De acuerdo a datos del INEGI, tan sólo en el año 2019 se documentaron casi 3 mil trescientos accidentes donde se involucraron motocicletas las cuales generaron, sólo ese año, 61 fallecidos y casi 1,400 heridos. Para darnos cuenta del crecimiento de esos siniestros, el registro del 2016 es de 2,800 percances y 42 muertos. Cifras ilustrativas del exponencial crecimiento en el uso de la motocicleta por encima de cualquier otro vehículo de transporte, incluida la bicicleta y cualquier forma alternativa de traslado en zonas dormitorio como las colonias marginadas de los municipios de Tlajomulco, El Salto y Tonalá, sólo por citar tres.

Ante ese crecimiento presentado principalmente en las regiones conurbadas del Área Metropolitana de Guadalajara, contrastan las pocas sanciones para el universo de usuarios de la motocicleta que, también de acuerdo al INEGI, experimentó un crecimiento entre 2010 al 2019 de 178 mil 453 a más de medio millón de unidades a este vehículo de transporte que representa el mayor número de faltas al Reglamento de Vialidad, según lo ha dado a conocer la Secretaría de Seguridad de Jalisco, de la cual depende la Policía Vial y no obstante, según señala esta institución, tener operativos permanentes para sancionar a los usuarios y observar en la ciudad todo tipo de suertes y evidencias donde podemos observar como constante, la impunidad vial para todo tipo de factores de riesgo como: El exceso de velocidad; La conducción bajo los efectos del alcohol; No usar el casco protector obligatorio para los motociclistas; No emplear ningún tipo de protección para los menores que suelen colocarse como acompañantes y, lo anterior de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cual señala con el mayor índice de mortalidad a los ciclistas, peatones y motociclistas que alcanzan el 60% del total de las defunciones por accidentes de tránsito, según investigaciones del Instituto Nacional de Salud Pública.

De hecho, de 1999 a 2009, las muertes entre los usuarios de motocicletas aumentaron 332%. Llama la atención que, durante el mismo periodo, el número de motocicletas en el país incrementó 312% y con ello se convirtieron, los motociclistas en el 23% de los casi millón y medio de personas que tuvieron algún tipo de accidente vial sin consecuencias fatales en el país.

Al panorama nacional habría que agregar otros factores de alta vulnerabilidad vial en las áreas metropolitanas más conflictivas del país como Guadalajara, donde además de la constante violación al Reglamento de Vialidad, se agrega el aumento, en medio de la pandemia, de compras de alimentos vía plataformas que convocan a los motociclistas empleados de esas tiendas, restaurantes, comercios, o comercializadoras que reparten algun insumo sin la formación suficiente para respetar el reglamento, evitar las infracciones, y sobre todo cuidar su propia vida antes de arriesgarla por tal de cumplir con la entrega de un producto, circulando por carriles no apropiados a exceso de velocidad sin respetar las señales además de los parámetros de autoprotección. Me refiero a la circulación en carriles de alta velocidad, en pasos a desnivel y sin respetar los semáforos y los límites de velocidad.

* Académico del CUAAD de la Universidad de Guadalajara

carlosm_orozco@hotmail.com

De acuerdo a datos del INEGI, tan sólo en el año 2019 se documentaron casi 3 mil trescientos accidentes donde se involucraron motocicletas las cuales generaron, sólo ese año, 61 fallecidos y casi 1,400 heridos. Para darnos cuenta del crecimiento de esos siniestros, el registro del 2016 es de 2,800 percances y 42 muertos. Cifras ilustrativas del exponencial crecimiento en el uso de la motocicleta por encima de cualquier otro vehículo de transporte, incluida la bicicleta y cualquier forma alternativa de traslado en zonas dormitorio como las colonias marginadas de los municipios de Tlajomulco, El Salto y Tonalá, sólo por citar tres.

Ante ese crecimiento presentado principalmente en las regiones conurbadas del Área Metropolitana de Guadalajara, contrastan las pocas sanciones para el universo de usuarios de la motocicleta que, también de acuerdo al INEGI, experimentó un crecimiento entre 2010 al 2019 de 178 mil 453 a más de medio millón de unidades a este vehículo de transporte que representa el mayor número de faltas al Reglamento de Vialidad, según lo ha dado a conocer la Secretaría de Seguridad de Jalisco, de la cual depende la Policía Vial y no obstante, según señala esta institución, tener operativos permanentes para sancionar a los usuarios y observar en la ciudad todo tipo de suertes y evidencias donde podemos observar como constante, la impunidad vial para todo tipo de factores de riesgo como: El exceso de velocidad; La conducción bajo los efectos del alcohol; No usar el casco protector obligatorio para los motociclistas; No emplear ningún tipo de protección para los menores que suelen colocarse como acompañantes y, lo anterior de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cual señala con el mayor índice de mortalidad a los ciclistas, peatones y motociclistas que alcanzan el 60% del total de las defunciones por accidentes de tránsito, según investigaciones del Instituto Nacional de Salud Pública.

De hecho, de 1999 a 2009, las muertes entre los usuarios de motocicletas aumentaron 332%. Llama la atención que, durante el mismo periodo, el número de motocicletas en el país incrementó 312% y con ello se convirtieron, los motociclistas en el 23% de los casi millón y medio de personas que tuvieron algún tipo de accidente vial sin consecuencias fatales en el país.

Al panorama nacional habría que agregar otros factores de alta vulnerabilidad vial en las áreas metropolitanas más conflictivas del país como Guadalajara, donde además de la constante violación al Reglamento de Vialidad, se agrega el aumento, en medio de la pandemia, de compras de alimentos vía plataformas que convocan a los motociclistas empleados de esas tiendas, restaurantes, comercios, o comercializadoras que reparten algun insumo sin la formación suficiente para respetar el reglamento, evitar las infracciones, y sobre todo cuidar su propia vida antes de arriesgarla por tal de cumplir con la entrega de un producto, circulando por carriles no apropiados a exceso de velocidad sin respetar las señales además de los parámetros de autoprotección. Me refiero a la circulación en carriles de alta velocidad, en pasos a desnivel y sin respetar los semáforos y los límites de velocidad.

* Académico del CUAAD de la Universidad de Guadalajara

carlosm_orozco@hotmail.com