/ domingo 23 de febrero de 2020

La delegación federal ¿naranja?

Muchos se preguntaron por qué el ingeniero Enrique, durante la más reciente visita que realizó Andrés Manuel López Obrador a Los Altos de Jalisco, elogió el trabajo de quien cobra aquí como delegado federal, Armando Zazueta. Pues bien, la respuesta parece que tiene que ver con un acuerdo entre el gobierno naranja y la Coordinación General de Programas Integrales de Desarrollo.

Fuentes allegadas al primer cerco alfarista aseguran que el pacto fue planteado desde la ciudad de México y consiste en mantener una coordinación tal, que promueva y empodere a personajes que tengan posibilidades reales de contender en las elecciones del 2021, con la mira puesta en el 2024.

Un ejemplo muy claro de ello, es el que se miró justo hace una semana, cuando el alcalde Pablo Lemus y la diputada federal emecista Fabiola Loya, encabezaron la entrega de apoyos a adultos mayores, invitados por el subdelegado regional, Demetrio Almeida Hernández.

Sobre lo anterior hay que destacar que no sólo contraviene la instrucción del presidente, quien en octubre giró un oficio mediante el cual pidió a los delegados evitar hacer uso de los programas sociales con sesgo partidista o para la auto promoción personal, sino que además se configura un delito, según lo establecen los Lineamientos Generales que Regulan las Funciones de las Delegaciones de Programas para el Desarrollo de la Secretaría del Bienestar.

Hay más. Detrás del trato se escondería una apuesta que puede provocar una crisis de pronóstico reservado entre los militantes de Morena en la entidad. Resulta que en virtud de que viene la renovación de los mandos tanto a nivel nacional como local, se habría puesto en marcha una estrategia con la finalidad de apoderarse de la dirigencia estatal y así controlar las finanzas del Movimiento de Regeneración Nacional. Pero por si faltara algo, existe la promesa de caminar de la mano con el gobierno estatal, a fin de evitar la derrota de Movimiento Ciudadano, en especial en el área metropolitana.

Nadie me sabe decir si de por medio habría varios millones de pesos de compensación, sin embargo, lo que sí me aseguran, es que de esto nada sabe López Obrador. Bueno, hasta hoy.

La lógica que mueve a los promotores de esta tenebra, tendría que ver con el hecho de que buscan ampliar sus espacios de poder político y económico, sin importar los principios que rigen a la 4T. Debido a que ya dominan la dependencia federal más importante de Jalisco, su siguiente objetivo es imponer candidaturas abyectas y consensuadas con los operadores anaranjados.

Así, ahora que trasciende la existencia de esta conjura, es preciso que AMLO atienda el asunto, puesto que los ánimos entre muchos de sus seguidores en el Estado están al borde del hartazgo.

Para terminar, no quiero dejar pasar la oportunidad para comentar tan sólo un caso que describe con toda precisión el perfil de quienes están al frente de la delegación federal.

Me cuentan que hay días que alrededor de la oficina principal de Becas Benito Juárez huele a perro, y es que un “alto” funcionario suele hacerse acompañar de un can de la raza Dachshund (conocido como salchicha); lo bueno de esto, es que ya no lleva a sus otras mascotas, porque antes apestaba a orines de gato.

Mail: oscarabregodeleon@hotmail.com

Muchos se preguntaron por qué el ingeniero Enrique, durante la más reciente visita que realizó Andrés Manuel López Obrador a Los Altos de Jalisco, elogió el trabajo de quien cobra aquí como delegado federal, Armando Zazueta. Pues bien, la respuesta parece que tiene que ver con un acuerdo entre el gobierno naranja y la Coordinación General de Programas Integrales de Desarrollo.

Fuentes allegadas al primer cerco alfarista aseguran que el pacto fue planteado desde la ciudad de México y consiste en mantener una coordinación tal, que promueva y empodere a personajes que tengan posibilidades reales de contender en las elecciones del 2021, con la mira puesta en el 2024.

Un ejemplo muy claro de ello, es el que se miró justo hace una semana, cuando el alcalde Pablo Lemus y la diputada federal emecista Fabiola Loya, encabezaron la entrega de apoyos a adultos mayores, invitados por el subdelegado regional, Demetrio Almeida Hernández.

Sobre lo anterior hay que destacar que no sólo contraviene la instrucción del presidente, quien en octubre giró un oficio mediante el cual pidió a los delegados evitar hacer uso de los programas sociales con sesgo partidista o para la auto promoción personal, sino que además se configura un delito, según lo establecen los Lineamientos Generales que Regulan las Funciones de las Delegaciones de Programas para el Desarrollo de la Secretaría del Bienestar.

Hay más. Detrás del trato se escondería una apuesta que puede provocar una crisis de pronóstico reservado entre los militantes de Morena en la entidad. Resulta que en virtud de que viene la renovación de los mandos tanto a nivel nacional como local, se habría puesto en marcha una estrategia con la finalidad de apoderarse de la dirigencia estatal y así controlar las finanzas del Movimiento de Regeneración Nacional. Pero por si faltara algo, existe la promesa de caminar de la mano con el gobierno estatal, a fin de evitar la derrota de Movimiento Ciudadano, en especial en el área metropolitana.

Nadie me sabe decir si de por medio habría varios millones de pesos de compensación, sin embargo, lo que sí me aseguran, es que de esto nada sabe López Obrador. Bueno, hasta hoy.

La lógica que mueve a los promotores de esta tenebra, tendría que ver con el hecho de que buscan ampliar sus espacios de poder político y económico, sin importar los principios que rigen a la 4T. Debido a que ya dominan la dependencia federal más importante de Jalisco, su siguiente objetivo es imponer candidaturas abyectas y consensuadas con los operadores anaranjados.

Así, ahora que trasciende la existencia de esta conjura, es preciso que AMLO atienda el asunto, puesto que los ánimos entre muchos de sus seguidores en el Estado están al borde del hartazgo.

Para terminar, no quiero dejar pasar la oportunidad para comentar tan sólo un caso que describe con toda precisión el perfil de quienes están al frente de la delegación federal.

Me cuentan que hay días que alrededor de la oficina principal de Becas Benito Juárez huele a perro, y es que un “alto” funcionario suele hacerse acompañar de un can de la raza Dachshund (conocido como salchicha); lo bueno de esto, es que ya no lleva a sus otras mascotas, porque antes apestaba a orines de gato.

Mail: oscarabregodeleon@hotmail.com