/ sábado 1 de junio de 2019

Impuestos de Trump a productos mexicanos confrontan

El presidente Trump determinó, aplicar un impuesto del 5% a todos los productos procedentes de México, medida que entraría en vigor a partir de este 10 de junio, y estará vigente dijo, hasta que cese el flujo de migrantes procedentes de Centroamérica a través de México, también dijo que ese arancel o impuesto a nuestros productos tendrá un incremento del 5% mensual es decir para julio será de 10%, en agosto 15%, septiembre 20% y octubre del 25% esto anunciado por Twiter como acostumbra, de manera unilateral.

Faltaría que su Congreso lo apruebe, aunque ese impuesto encarece el precio para el consumidor de los productos mexicanos, muchos, que son de primera necesidad en el mercado americano. Ello afecta la competitividad de nuestros productos en Estados Unidos, principalmente a los consumidores, particularmente, a los consumidores mexicanos de aquel lado, productos: como aguacate, jitomate y en productos elaborados, refacciones, industria automotriz e insumos para la industria de computadores y ordenadores, entre otros. Nos afecta, pero Trump confirma su intención de que así los mexicanos paguemos su muro.

Por su parte el Gobierno de México ha insistido en la postura de abordar el tema de migración de manera integral y humanitaria, privilegiando la inversión en aquellos países donde hay mas desigualdad, desempleo y oportunidades de desarrollo, así manifestó en la carta que enviara ayer, el presidente López Obrador a Trump, pero como siempre, la política del garrote de Estados Unidos, es la bandera electoral de Trump. Tema riesgoso que puede revertírsele electoralmente, aunque, es claro que el hombre del copete oxigenado zanahoria, siempre mide los pasos que da. En política internacional, como sucede, cuando usted se enfrente a un delincuente, uno piensa normal, pero a quien tiene enfrente piensa como delincuente, para enfrentarlos, hay que pensar como delincuente. Trump piensa y actúa como empresario agresivo, negociador rudo, y presidente de EEUU, nunca esperemos que piense a favor de nosotros, también debe encontrar de nuestra parte, respuestas enérgicas, dignas y duras. Equivalentes correspondientes a las mismas medidas, si toca además los envíos de mexicanos con elevados impuestos, lo mismo debe hacer México con las ganancias delas inversiones de americanos en su retorno a USA.

Las relaciones internacionales no se resuelven con buena voluntad, ni Mahatma Gandhi, el héroe del pacifismo de la independencia de la India fue totalmente pacifista.

La carta del Presidente parece dirigida a un interlocutor diferente a Trump, el texto es excelente como propuesta para el Premio Nobel de la Paz, López Obrador, acertadamente, copia y repite lo señalado durante muchos años por todos los líderes que han gobernado los países desarrollados, desarrollar las economías de los países productores de migrantes para que su población se arraiguen en sus patrias y no aspiren a migrar. El tema es igual en Latinoamérica, África y Asia.

Si pone el muro, nosotros cerremos la frontera y no pasa la droga, entonces veríamos quienes brincarían el muro. No con expresiones de tolerancia con quien no entiende o no quiere entender ese lenguaje. Como decía doña Susana Yañez. Mi abuelita, no se encorve, porque quien más se encorva, más se le ven las corvas. La expresión encorvarse, hoy se traduce en inclinarse, agacharse, humillarse.


sadot16@hotmail.com

El presidente Trump determinó, aplicar un impuesto del 5% a todos los productos procedentes de México, medida que entraría en vigor a partir de este 10 de junio, y estará vigente dijo, hasta que cese el flujo de migrantes procedentes de Centroamérica a través de México, también dijo que ese arancel o impuesto a nuestros productos tendrá un incremento del 5% mensual es decir para julio será de 10%, en agosto 15%, septiembre 20% y octubre del 25% esto anunciado por Twiter como acostumbra, de manera unilateral.

Faltaría que su Congreso lo apruebe, aunque ese impuesto encarece el precio para el consumidor de los productos mexicanos, muchos, que son de primera necesidad en el mercado americano. Ello afecta la competitividad de nuestros productos en Estados Unidos, principalmente a los consumidores, particularmente, a los consumidores mexicanos de aquel lado, productos: como aguacate, jitomate y en productos elaborados, refacciones, industria automotriz e insumos para la industria de computadores y ordenadores, entre otros. Nos afecta, pero Trump confirma su intención de que así los mexicanos paguemos su muro.

Por su parte el Gobierno de México ha insistido en la postura de abordar el tema de migración de manera integral y humanitaria, privilegiando la inversión en aquellos países donde hay mas desigualdad, desempleo y oportunidades de desarrollo, así manifestó en la carta que enviara ayer, el presidente López Obrador a Trump, pero como siempre, la política del garrote de Estados Unidos, es la bandera electoral de Trump. Tema riesgoso que puede revertírsele electoralmente, aunque, es claro que el hombre del copete oxigenado zanahoria, siempre mide los pasos que da. En política internacional, como sucede, cuando usted se enfrente a un delincuente, uno piensa normal, pero a quien tiene enfrente piensa como delincuente, para enfrentarlos, hay que pensar como delincuente. Trump piensa y actúa como empresario agresivo, negociador rudo, y presidente de EEUU, nunca esperemos que piense a favor de nosotros, también debe encontrar de nuestra parte, respuestas enérgicas, dignas y duras. Equivalentes correspondientes a las mismas medidas, si toca además los envíos de mexicanos con elevados impuestos, lo mismo debe hacer México con las ganancias delas inversiones de americanos en su retorno a USA.

Las relaciones internacionales no se resuelven con buena voluntad, ni Mahatma Gandhi, el héroe del pacifismo de la independencia de la India fue totalmente pacifista.

La carta del Presidente parece dirigida a un interlocutor diferente a Trump, el texto es excelente como propuesta para el Premio Nobel de la Paz, López Obrador, acertadamente, copia y repite lo señalado durante muchos años por todos los líderes que han gobernado los países desarrollados, desarrollar las economías de los países productores de migrantes para que su población se arraiguen en sus patrias y no aspiren a migrar. El tema es igual en Latinoamérica, África y Asia.

Si pone el muro, nosotros cerremos la frontera y no pasa la droga, entonces veríamos quienes brincarían el muro. No con expresiones de tolerancia con quien no entiende o no quiere entender ese lenguaje. Como decía doña Susana Yañez. Mi abuelita, no se encorve, porque quien más se encorva, más se le ven las corvas. La expresión encorvarse, hoy se traduce en inclinarse, agacharse, humillarse.


sadot16@hotmail.com