/ lunes 25 de abril de 2022

¿Hasta ser ilotas?

Es indiscutible que la sociedad mexicana en todos sus estratos sociales ha sido víctima de un trato gubernamental, tanto federal como estatal, totalmente indigno, irrespetuoso, deshonesto, desleal, corrupto y cobarde, me atrevo a manifestar estos adjetivos en contra de las autoridades, porque todos los días, por todas partes del territorio nacional y en particular en nuestro estado, tales conductas son desplegadas, sobre todo por el gobierno federal, tratando de propiciar un sectarismo entre los políticos y la sociedad civil, en particular al político que disiente con el ejecutivo federal, que ha logado someter a una gran mayoría del Congreso de la Unión, a una añeja política mexicana, donde eran las horas que el gobernante en turno dijera, que hoy se repite una y otra vez, a grado tal de que han tolerado los que tienen la responsabilidad de someter a los Ejecutivos, a lo que el pueblo mexicano ha decidido que sea nuestro sistema de vida en ese código nacional que tan orgullosamente llamamos Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, tan así que a los propios gobernantes les fija reglas inalienables, improrrogables, intransferibles, como es, que al asumir el cargo protestan cumplir y hacer cumplir tal código, como las demás leyes que de este emanan y vemos como el Ejecutivo Federal, no tan solo de haber sometido a los otros dos poderes que integran el gobierno por el que se optó por la mayoría de los mexicanos, que sería un pueblo republicano, soberano y libre, no obstante de que el titular del Ejecutivo Federal ha incurrido en delitos graves, como es el no garantizar el derecho a la vida, a la libertad, a la justicia, al patrimonio, a la educación, así como el de respetar el derecho exclusivo del ciudadano como lo establece la misma Constitución en la revocación de mandato, en lo que han participado las mimas fuerzas armadas, el Secretario de Gobernación y demás autoridades que todos vimos que impunemente actuaron en esa farsa, que no obstante de haberse procesado por la única institución respetuosa y respetable como lo es el INE, a la que tenemos el deber de defender y salvar de la arrogancia del gobierno Federal en sus tres poderes, pues es evidente como el poder Judicial Federal, refiriéndome a la Suprema Corte y salvando la honestidad del Tribunal Federal Electoral, que han mostrado sus integrantes el cumplimiento fiel a su deber y a la protesta que rindieron al asumir el cargo; ha sido tan grave y de mala intención las actitudes de los Ejecutivos Federal y Estatal, al grado tal, de que el titular del Ejecutivo Federal se ha atrevido a manifestarse en contra de la observancia de a la ley, ya que así lo ha manifestado expresamente ante todo el contexto nacional y que actos de esa naturaleza existen por demás en estos tres años y meses, llegando al cinismo de jactarse públicamente de esos actos, que entre otros, el de la liberación de Ovidio, lo que constituye el delito de evasión de presos; el consecuentar a un Fiscal General de la Republica de cometer sendos delitos de abuso de autoridad, entre otros tipos diversos, que también se atribuyen a la Fiscal de la Ciudad de México, agentes del Ministerio Público, Jueces y Magistrados, que gracias, aunque sea aislado a una resolución del Pleno de la Corte, ya que hay poco que reconocer a ese Poder Judicial Federal, que está desgastado, desleal, ignorante, indiferente y muy alejado de la sociedad, con actuaciones dilatorias a diestra y siniestra, con titulares además de incapaces, la gran mayoría prepotentes y arrogantes con el demandante de la justicia.


Ante tal estado de cosas, es que me surge la interrogante de que parece que la sociedad mexicana tendrá que llegar a la esclavitud para reaccionar y someter al cumplimiento del deber de todas las autoridades en cada una de sus responsabilidades que las diversas leyes les asignan, pues ya hemos pagado con mucha sangre, desapariciones, robos, abusos de autoridad, con la injustificable indiferencia y desatención de los gobiernos para combatir la impunidad que es la causa fundamental del crecimiento de la criminalidad en todo el país, que aquí en nuestra entidad en particular, aunque las autoridades digan lo contrario y sin recato alguno, mientan cada día, la anarquía y desorden siguen a todo vapor.


E mail: locb15@hotmail.com



*

Es indiscutible que la sociedad mexicana en todos sus estratos sociales ha sido víctima de un trato gubernamental, tanto federal como estatal, totalmente indigno, irrespetuoso, deshonesto, desleal, corrupto y cobarde, me atrevo a manifestar estos adjetivos en contra de las autoridades, porque todos los días, por todas partes del territorio nacional y en particular en nuestro estado, tales conductas son desplegadas, sobre todo por el gobierno federal, tratando de propiciar un sectarismo entre los políticos y la sociedad civil, en particular al político que disiente con el ejecutivo federal, que ha logado someter a una gran mayoría del Congreso de la Unión, a una añeja política mexicana, donde eran las horas que el gobernante en turno dijera, que hoy se repite una y otra vez, a grado tal de que han tolerado los que tienen la responsabilidad de someter a los Ejecutivos, a lo que el pueblo mexicano ha decidido que sea nuestro sistema de vida en ese código nacional que tan orgullosamente llamamos Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, tan así que a los propios gobernantes les fija reglas inalienables, improrrogables, intransferibles, como es, que al asumir el cargo protestan cumplir y hacer cumplir tal código, como las demás leyes que de este emanan y vemos como el Ejecutivo Federal, no tan solo de haber sometido a los otros dos poderes que integran el gobierno por el que se optó por la mayoría de los mexicanos, que sería un pueblo republicano, soberano y libre, no obstante de que el titular del Ejecutivo Federal ha incurrido en delitos graves, como es el no garantizar el derecho a la vida, a la libertad, a la justicia, al patrimonio, a la educación, así como el de respetar el derecho exclusivo del ciudadano como lo establece la misma Constitución en la revocación de mandato, en lo que han participado las mimas fuerzas armadas, el Secretario de Gobernación y demás autoridades que todos vimos que impunemente actuaron en esa farsa, que no obstante de haberse procesado por la única institución respetuosa y respetable como lo es el INE, a la que tenemos el deber de defender y salvar de la arrogancia del gobierno Federal en sus tres poderes, pues es evidente como el poder Judicial Federal, refiriéndome a la Suprema Corte y salvando la honestidad del Tribunal Federal Electoral, que han mostrado sus integrantes el cumplimiento fiel a su deber y a la protesta que rindieron al asumir el cargo; ha sido tan grave y de mala intención las actitudes de los Ejecutivos Federal y Estatal, al grado tal, de que el titular del Ejecutivo Federal se ha atrevido a manifestarse en contra de la observancia de a la ley, ya que así lo ha manifestado expresamente ante todo el contexto nacional y que actos de esa naturaleza existen por demás en estos tres años y meses, llegando al cinismo de jactarse públicamente de esos actos, que entre otros, el de la liberación de Ovidio, lo que constituye el delito de evasión de presos; el consecuentar a un Fiscal General de la Republica de cometer sendos delitos de abuso de autoridad, entre otros tipos diversos, que también se atribuyen a la Fiscal de la Ciudad de México, agentes del Ministerio Público, Jueces y Magistrados, que gracias, aunque sea aislado a una resolución del Pleno de la Corte, ya que hay poco que reconocer a ese Poder Judicial Federal, que está desgastado, desleal, ignorante, indiferente y muy alejado de la sociedad, con actuaciones dilatorias a diestra y siniestra, con titulares además de incapaces, la gran mayoría prepotentes y arrogantes con el demandante de la justicia.


Ante tal estado de cosas, es que me surge la interrogante de que parece que la sociedad mexicana tendrá que llegar a la esclavitud para reaccionar y someter al cumplimiento del deber de todas las autoridades en cada una de sus responsabilidades que las diversas leyes les asignan, pues ya hemos pagado con mucha sangre, desapariciones, robos, abusos de autoridad, con la injustificable indiferencia y desatención de los gobiernos para combatir la impunidad que es la causa fundamental del crecimiento de la criminalidad en todo el país, que aquí en nuestra entidad en particular, aunque las autoridades digan lo contrario y sin recato alguno, mientan cada día, la anarquía y desorden siguen a todo vapor.


E mail: locb15@hotmail.com



*