El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México Benito Juárez (AICM), -cuyo primer vuelo se hizo en Noviembre del año 1911, en los llanos de Balbuena, por el capitán Alberto Braniff- tiene 450 mil operaciones aeroportuarias por año, esto es, 1,233 operaciones en números redondos por día, lo que implica que se trabaja con “saturación”, a todas horas del día y de la noche. Pero tal “saturación” fue deliberada, para que de allí surgiera la necesidad de construir un nuevo aeropuerto.
Pero lo anterior sucede por decisiones caprichosas de titulares del Poder Ejecutivo Federal (PEF) en turno: Felipe Calderón Hinojosa (FCH) salido del Partido de Acción Nacional (PAN) -sexenio gubernamental 2006-2012- y Enrique Peña Nieto (EPN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), -sexenio gubernamental 2012-2018-, que concluye el día 30 de Noviembre, o sea, dentro de 19 días.
En el año de 2002, el entonces primer presidente panista Vicente Fox Quesada (VFQ), sexenio gubernamental 2000-2006, pretendió construir un nuevo aeropuerto, pero se encontró con la oposición -por considerar que les dañaba su hábitat- de los habitantes de San Salvador Atenco y Texcoco, a quiénes mandó reprimir violentamente EPN los días 3 y 4 de Mayo de 2006, como gobernador del Estado de México.
Por otra parte, a diez minutos de vuelo a la Ciudad de México (CDMEX), se encuentra el Aeropuerto Internacional de Toluca (AIT), con infraestructura para dar servicio a ocho millones de pasajeros anuales, pero se encuentra totalmente subutilizado, en razón de que por “orden” de FCH, las aerolíneas Volaris e Interjet, fueron trasladadas al AICM, a ocupar en 2010 los lugares que dejó vacantes la empresa “Compañía Mexicana de Aviación” (CMA), misma que quebró debido a la crisis sanitaria que empezó el 17 de Marzo del año 2008 -a la que se le cancelaron todos sus vuelos-, en que en la propia secretaría de Salud (SS), brotó la epidemia de la influenza provocada por el virus H1N1, la empresa mexicana más antigua de aviación a la que FCH, “dejó morir sola”, sin prestarle apoyo alguno para salvarla. EPN, tomo posesión como presidente del país, el 1º de Diciembre del 2012, pero siguió con la misma apatía que FCH, respecto de la CMA, a la que ambos han dejado morir, haciéndola perder todos sus derechos en aeropuertos internacionales de todos los países. Igualmente EPN, jamás tomo medida alguna para revivir el AIT, a pesar de que se trata del aeropuerto en la Entidad Federativa de la que es nativo, pero al que vencieron ambiciones económicas en el sentido de construir el nuevo AICM, en el vaso del Lago de Texcoco, y, también con la mira de que en su momento se hicieran fraccionamientos para viviendas en los terrenos en que ahora opera el AICM.
El AIT con su excelente infraestructura, en el año 2006 atendió un millón de pasajeros, en el año 2007 atendió a dos millones de pasajeros, en 2008 fueron cuatro millones de pasajeros, etc., teniendo capacidad de atender el doble, pero su caída se acentuó, a partir del año 2010, -en que las aerolíneas Volaris e Interjet que tenían allí su base se las llevaron al AICM-, pero se fue cayendo, de tal manera que en año 2018, hasta esta fecha solo ha atendido aproximadamente 650,000 pasajeros.
¡Vaya desperdicio del AIT solo por intereses políticos turbios!
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