/ lunes 11 de octubre de 2021

Entre el pacto y las elecciones 2.0

Desde finales del año pasado con la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio 2021 en el que hubo una reducción en términos reales del presupuesto federalizado para Jalisco, el gobernador desplegó una narrativa iracunda en la que no se cansaba de avivar la histórica rencilla entre nuestro estado y la capital, en la que haciendo alusión a la importancia del federalismo y criticando los tintes centralistas en los que los gobiernos nacionales con tanta facilidad adoptan, había que defender a Jalisco.

Y así transcurrieron los meses, con controvertidas declaraciones, con la Alianza Federalista y con la llegada de la etapa de campañas para renovar el congreso local, el de la Unión y los ayuntamientos. Para este punto, ya había permeado un discurso ambiguo sobre el trato fiscal indigno que recibía Jalisco, las injusticias del gobierno federal con las entidades y la construcción de una historia protagonizada por el gobernador y su partido, que además, les convertía en la única vía ante este escenario catastrófico.

Fue así que esta narrativa terminó por fascinar a algunos, por persuadir a otros e impactar por lo caricaturesco a unos cuantos. Y ese se convirtió en el eje de las campañas emecistas, más allá de propuestas reales y de la autocrítica, porque eso resultaba secundario ante la turba de sentires que se volvieron capital político.

Ahora, que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anuló la elección de Tlaquepaque y se convocó a una elección extraordinaria después de determinar que se violó la separación de los poderes Iglesia-Estado debido a las declaraciones de un alto clérigo y cómo esto influenció el resultado, nuevamente se insiste en sostener un discurso sobre el pacto fiscal que más que atenderse con seriedad y hechos puntuales, sirvió para dar réditos al oficialismo del estado en los comicios pasados. Lo que es peor: el partido gobernante está dispuesto a rayar en la ilegalidad con tal de no perder pues la determinación de que solo compitan mujeres en nombre de la paridad , es vergonzoso. Esa decisión debió haberla tomado el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana y no un congreso local mayoritariamente naranja y caracterizado por su poco criterio.

Por si no fuera poco, el gobernador insiste en una tergiversada consulta sobre el pacto fiscal, con una pregunta a modo, sobre un tema sumamente complejo tratándolo de una forma groseramente acotado, con muchísimos días de votación, y en simultaneidad con la elección extraordinaria en Tlaquepaque. No cabe duda que en Jalisco, aplica el famoso dicho “candil de la calle, oscuridad de su casa” y que hace mucho tiempo que el Estado de Derecho y la separación de poderes, nos suenan a burla.

* Vicepresidenta de Hagamos

Desde finales del año pasado con la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio 2021 en el que hubo una reducción en términos reales del presupuesto federalizado para Jalisco, el gobernador desplegó una narrativa iracunda en la que no se cansaba de avivar la histórica rencilla entre nuestro estado y la capital, en la que haciendo alusión a la importancia del federalismo y criticando los tintes centralistas en los que los gobiernos nacionales con tanta facilidad adoptan, había que defender a Jalisco.

Y así transcurrieron los meses, con controvertidas declaraciones, con la Alianza Federalista y con la llegada de la etapa de campañas para renovar el congreso local, el de la Unión y los ayuntamientos. Para este punto, ya había permeado un discurso ambiguo sobre el trato fiscal indigno que recibía Jalisco, las injusticias del gobierno federal con las entidades y la construcción de una historia protagonizada por el gobernador y su partido, que además, les convertía en la única vía ante este escenario catastrófico.

Fue así que esta narrativa terminó por fascinar a algunos, por persuadir a otros e impactar por lo caricaturesco a unos cuantos. Y ese se convirtió en el eje de las campañas emecistas, más allá de propuestas reales y de la autocrítica, porque eso resultaba secundario ante la turba de sentires que se volvieron capital político.

Ahora, que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anuló la elección de Tlaquepaque y se convocó a una elección extraordinaria después de determinar que se violó la separación de los poderes Iglesia-Estado debido a las declaraciones de un alto clérigo y cómo esto influenció el resultado, nuevamente se insiste en sostener un discurso sobre el pacto fiscal que más que atenderse con seriedad y hechos puntuales, sirvió para dar réditos al oficialismo del estado en los comicios pasados. Lo que es peor: el partido gobernante está dispuesto a rayar en la ilegalidad con tal de no perder pues la determinación de que solo compitan mujeres en nombre de la paridad , es vergonzoso. Esa decisión debió haberla tomado el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana y no un congreso local mayoritariamente naranja y caracterizado por su poco criterio.

Por si no fuera poco, el gobernador insiste en una tergiversada consulta sobre el pacto fiscal, con una pregunta a modo, sobre un tema sumamente complejo tratándolo de una forma groseramente acotado, con muchísimos días de votación, y en simultaneidad con la elección extraordinaria en Tlaquepaque. No cabe duda que en Jalisco, aplica el famoso dicho “candil de la calle, oscuridad de su casa” y que hace mucho tiempo que el Estado de Derecho y la separación de poderes, nos suenan a burla.

* Vicepresidenta de Hagamos