/ domingo 28 de abril de 2019

Elección de magistrados

La democracia se soporta en un trípode de división de poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Hoy más que nunca, Jalisco requiere de poderes fuertes y sólidos.

Lamentablemente el Poder Judicial ha sido manoseado por quienes integran los otros dos poderes. No sólo se ha politizado, sino que se ha partidizado.

En las asignaciones se ha dado de todo, desde trafico de influencias, corrupción, reparto de cuotas, hasta la venta de espacios…Todo lo anterior, redunda en corrupción y en una mala administración y procuración de justicia. Por ende, la credibilidad de la sociedad a las instituciones relacionadas con la administración de justicia es poca o nula.

La división de poderes debe practicarse en toda la extensión de la palabra, cada uno de los poderes tiene perfectamente delimitadas sus facultades en la misma Constitución Política del Estado de Jalisco, y en las leyes relativas que tienen que ver con sus funciones.

En mi opinión, para poder tener un Poder Judicial en Jalisco, serio y sólido, es menester nombrar a magistrados con un mecanismo alejado de la la politización o partidización tal como indebidamente se ha hecho en nuestra entidad. En la que se designe a los magistrados aplicando un concepto llamado meritocracia, esto es, aquel aspirante que sea designado, no le deba el cargo a nadie… tomando en consideración su experiencia, capacidad, carrera judicial, grados académicos y exámenes. Tanto teóricos como prácticos, para designar a las mujeres u hombres más preparados para ocupar la magistratura tomando en cuenta que son diversas materias y dista mucha la especialización en materia penal, civil, administrativa entre otras.

Se habla mucho de democracia en Jalisco y de querer transformar a nuestra entidad, entonces ¿por qué no la practicamos? Para la designación y nombramiento de magistrados, involucremos a los grupos que son factor de poder en Jalisco, como son las universidades, sector empresarial, barras y colegios de abogados, asociaciones civiles… por citar algunos. Cada quien puede jugar un rol especifico, desde la elaboración de reactivos para los exámenes teóricos, hasta contar con su presencia y participación en el examen práctico.

El sistema vigente de elección señala que el Congreso emite la convocatoria y el Consejo de la Judicatura enlista a los aspirantes, de esta lista los diputados eligen al o la magistrada. En caso de desacuerdo en su designación, el Consejo mandaría una nueva lista para que de esta elijan al mismo (a).

Este mecanismo ya no esta funcionando adecuadamente por los motivos antes mencionados, por ello es que en “periodo vacacional” se ha lanzado la siguiente propuesta, que en mi opinión es de corte absolutista y pareciera rayar en un golpe de poder. Al ya lastimado Poder Judicial: el Gobernador emitiría la convocatoria. De los aspirantes inscritos, el Gobernador elegiría a tres, de esta terna los diputados elegirían al magistrado. Ante reiterado desacuerdo de los legisladores el Ejecutivo designaría al magistrado. La pregunta es ¿dónde está la novedad? Si esta es la forma como antes se elegía y que tantos problemas nos ocasionó a los jaliscienses, con un poder extralimitado del Poder Ejecutivo.

¿Dónde quedaría la independencia y autonomía para la toma de sus decisiones que deberían ser apegadas a derecho y jurídicas, alejadas de criterios discrecionales y políticos, fuera de líneas que podrían afectar a la impartición de justicia.

Aquí dejamos la propuesta para que verdaderamente se combata el reparto de cuotas, aceptado por los legisladores. Y además se combatan: la corrupción, el tráfico de influencias, la venta de plazas por mencionar algunas malas prácticas que laceran la vida democrática de Jalisco.

Es tiempo de pensar en serio el tema de elección de magistrados, y que se deje de ver como un botín político por quienes detentan el poder por tres o seis años respectivamente. Buscando una seria independencia y autonomía de las personas que impartirán justicia en Jalisco, alejándolos de los tentáculos de los políticos que tanto daño le hacen a los justiciados y justiciables en Jalisco.

jimenezabogado@gmail.com

La democracia se soporta en un trípode de división de poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Hoy más que nunca, Jalisco requiere de poderes fuertes y sólidos.

Lamentablemente el Poder Judicial ha sido manoseado por quienes integran los otros dos poderes. No sólo se ha politizado, sino que se ha partidizado.

En las asignaciones se ha dado de todo, desde trafico de influencias, corrupción, reparto de cuotas, hasta la venta de espacios…Todo lo anterior, redunda en corrupción y en una mala administración y procuración de justicia. Por ende, la credibilidad de la sociedad a las instituciones relacionadas con la administración de justicia es poca o nula.

La división de poderes debe practicarse en toda la extensión de la palabra, cada uno de los poderes tiene perfectamente delimitadas sus facultades en la misma Constitución Política del Estado de Jalisco, y en las leyes relativas que tienen que ver con sus funciones.

En mi opinión, para poder tener un Poder Judicial en Jalisco, serio y sólido, es menester nombrar a magistrados con un mecanismo alejado de la la politización o partidización tal como indebidamente se ha hecho en nuestra entidad. En la que se designe a los magistrados aplicando un concepto llamado meritocracia, esto es, aquel aspirante que sea designado, no le deba el cargo a nadie… tomando en consideración su experiencia, capacidad, carrera judicial, grados académicos y exámenes. Tanto teóricos como prácticos, para designar a las mujeres u hombres más preparados para ocupar la magistratura tomando en cuenta que son diversas materias y dista mucha la especialización en materia penal, civil, administrativa entre otras.

Se habla mucho de democracia en Jalisco y de querer transformar a nuestra entidad, entonces ¿por qué no la practicamos? Para la designación y nombramiento de magistrados, involucremos a los grupos que son factor de poder en Jalisco, como son las universidades, sector empresarial, barras y colegios de abogados, asociaciones civiles… por citar algunos. Cada quien puede jugar un rol especifico, desde la elaboración de reactivos para los exámenes teóricos, hasta contar con su presencia y participación en el examen práctico.

El sistema vigente de elección señala que el Congreso emite la convocatoria y el Consejo de la Judicatura enlista a los aspirantes, de esta lista los diputados eligen al o la magistrada. En caso de desacuerdo en su designación, el Consejo mandaría una nueva lista para que de esta elijan al mismo (a).

Este mecanismo ya no esta funcionando adecuadamente por los motivos antes mencionados, por ello es que en “periodo vacacional” se ha lanzado la siguiente propuesta, que en mi opinión es de corte absolutista y pareciera rayar en un golpe de poder. Al ya lastimado Poder Judicial: el Gobernador emitiría la convocatoria. De los aspirantes inscritos, el Gobernador elegiría a tres, de esta terna los diputados elegirían al magistrado. Ante reiterado desacuerdo de los legisladores el Ejecutivo designaría al magistrado. La pregunta es ¿dónde está la novedad? Si esta es la forma como antes se elegía y que tantos problemas nos ocasionó a los jaliscienses, con un poder extralimitado del Poder Ejecutivo.

¿Dónde quedaría la independencia y autonomía para la toma de sus decisiones que deberían ser apegadas a derecho y jurídicas, alejadas de criterios discrecionales y políticos, fuera de líneas que podrían afectar a la impartición de justicia.

Aquí dejamos la propuesta para que verdaderamente se combata el reparto de cuotas, aceptado por los legisladores. Y además se combatan: la corrupción, el tráfico de influencias, la venta de plazas por mencionar algunas malas prácticas que laceran la vida democrática de Jalisco.

Es tiempo de pensar en serio el tema de elección de magistrados, y que se deje de ver como un botín político por quienes detentan el poder por tres o seis años respectivamente. Buscando una seria independencia y autonomía de las personas que impartirán justicia en Jalisco, alejándolos de los tentáculos de los políticos que tanto daño le hacen a los justiciados y justiciables en Jalisco.

jimenezabogado@gmail.com

ÚLTIMASCOLUMNAS
miércoles 05 de agosto de 2020

Primer estudiante de la UdeG en fosa

Francisco Jiménez Reynoso

lunes 27 de julio de 2020

Violencia imparable

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 19 de julio de 2020

Del uso de la fuerza

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 12 de julio de 2020

Reingeniería de la violencia

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 05 de julio de 2020

La violencia azteca y Jalisco

Francisco Jiménez Reynoso

lunes 29 de junio de 2020

Los Cuatro Jinetes

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 21 de junio de 2020

De la gran necrópolis de Jalisco

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 14 de junio de 2020

Presos políticos en Jalisco

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 07 de junio de 2020

El caos en Jalisco

Francisco Jiménez Reynoso

domingo 17 de mayo de 2020

Fuerzas armadas por decreto

Francisco Jiménez Reynoso

Cargar Más