/ domingo 14 de febrero de 2021

El Outsourcing ¿borrón y cuenta nueva?

México no puede aislarse del resto del mundo, jamás deberá reaccionar con un efecto avestruz ante una realidad como la subcontratación o el outsourcing, la mejor decisión para todos es su regulación con responsabilidad y cabalidad, pensando en todo el ecosistema económico y social.

El pronunciamiento por su regulación responsable, no sobrerregulación, tampoco su eliminación; tiene su fundamento en la importancia del concepto, la subcontratación de espacios laborales para mejorar la productividad de una empresa, nunca por el abuso o sobreexplotación de la mano de obra mexicana.

Los dos puntos fundamentales que permitirán generar una claridad en la subcontratación, son estímulos económicos para las empresas a través de la deducibilidad, la claridad en la participación del reparto del PTU. Es urgente la modificación de la política hacendaria del país.

Sin duda alguna apremia una clarificación –vamos muy tarde– de la normatividad para que la subcontratación sea un mecanismo de respaldo para cientos de empresas en el país, eso obligará a que quienes están abusando, en todos los sentidos legales, se ajusten al cumplimiento de la ley, el resultado es la generación de un ganar-ganar; sí se puede.

Contemplar en la ley normas, reglamentos conceptos como deducibilidad y clarificación del reparto de utilidades permitirá eliminar las simulaciones y afectaciones para los trabajadores.

Además del cumplimiento a los compromisos asumidos en acuerdos internacionales como el T-MEC, está de por medio el seguir avanzando y generar una certidumbre que beneficia a todos.

En Jalisco la regulación responsable del outsourcing mantendría el avance de la competitividad de un estado que se ubica en los primeros lugares de generación de empleo en el país y que día a día trabaja sin descanso para una igualdad social.

El andamiaje del desarrollo económico jalisciense está integrado por 378,655 unidades económicas de acuerdo a la última información reflejada en el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE, INEGI), 98,067 patrones; y de acuerdo al IIEG vía reporte del IMSS en febrero se tenían 1, 787,122 de los cuales 6,755 son nuevos y de estos 4,950 permanentes y 1,805 eventuales.

Como un dato nacional, la empresa gestora de recursos humanos Manpowergroup, informó recientemente que en México 6 de cada 10 empresas realizan subcontratación de empleos eventuales; en el caso de las micro, pequeñas y medianas la participación de quienes labora bajo el amparo de la subcontratación alcanza el 53.2%.

La prioridad es sentar las bases legales para crear una cultura del orden y protección de las fuentes laborales y de los generadores de estas a través del outsourcing, el cual ya está contemplado en el artículo 15-A de la ley federal del trabajo; requiere de adecuaciones a favor de una reglamentación que promueva la inversión.

Países como Argentina, Colombia, Chile y nuestro socio comercial Estados Unidos, cuentan con la regulación de la subcontratación. Si a las reglas claras en defensa de la mano de obra mexicana, y como garantía para generar el clima propicio que atraiga las inversiones al país en un ganar-ganar.

¡Es el momento para que en México se fomente la cultura de la legalidad!


* Secretario del Trabajo en Jalisco

México no puede aislarse del resto del mundo, jamás deberá reaccionar con un efecto avestruz ante una realidad como la subcontratación o el outsourcing, la mejor decisión para todos es su regulación con responsabilidad y cabalidad, pensando en todo el ecosistema económico y social.

El pronunciamiento por su regulación responsable, no sobrerregulación, tampoco su eliminación; tiene su fundamento en la importancia del concepto, la subcontratación de espacios laborales para mejorar la productividad de una empresa, nunca por el abuso o sobreexplotación de la mano de obra mexicana.

Los dos puntos fundamentales que permitirán generar una claridad en la subcontratación, son estímulos económicos para las empresas a través de la deducibilidad, la claridad en la participación del reparto del PTU. Es urgente la modificación de la política hacendaria del país.

Sin duda alguna apremia una clarificación –vamos muy tarde– de la normatividad para que la subcontratación sea un mecanismo de respaldo para cientos de empresas en el país, eso obligará a que quienes están abusando, en todos los sentidos legales, se ajusten al cumplimiento de la ley, el resultado es la generación de un ganar-ganar; sí se puede.

Contemplar en la ley normas, reglamentos conceptos como deducibilidad y clarificación del reparto de utilidades permitirá eliminar las simulaciones y afectaciones para los trabajadores.

Además del cumplimiento a los compromisos asumidos en acuerdos internacionales como el T-MEC, está de por medio el seguir avanzando y generar una certidumbre que beneficia a todos.

En Jalisco la regulación responsable del outsourcing mantendría el avance de la competitividad de un estado que se ubica en los primeros lugares de generación de empleo en el país y que día a día trabaja sin descanso para una igualdad social.

El andamiaje del desarrollo económico jalisciense está integrado por 378,655 unidades económicas de acuerdo a la última información reflejada en el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE, INEGI), 98,067 patrones; y de acuerdo al IIEG vía reporte del IMSS en febrero se tenían 1, 787,122 de los cuales 6,755 son nuevos y de estos 4,950 permanentes y 1,805 eventuales.

Como un dato nacional, la empresa gestora de recursos humanos Manpowergroup, informó recientemente que en México 6 de cada 10 empresas realizan subcontratación de empleos eventuales; en el caso de las micro, pequeñas y medianas la participación de quienes labora bajo el amparo de la subcontratación alcanza el 53.2%.

La prioridad es sentar las bases legales para crear una cultura del orden y protección de las fuentes laborales y de los generadores de estas a través del outsourcing, el cual ya está contemplado en el artículo 15-A de la ley federal del trabajo; requiere de adecuaciones a favor de una reglamentación que promueva la inversión.

Países como Argentina, Colombia, Chile y nuestro socio comercial Estados Unidos, cuentan con la regulación de la subcontratación. Si a las reglas claras en defensa de la mano de obra mexicana, y como garantía para generar el clima propicio que atraiga las inversiones al país en un ganar-ganar.

¡Es el momento para que en México se fomente la cultura de la legalidad!


* Secretario del Trabajo en Jalisco