/ viernes 7 de agosto de 2020

El hartazgo viaja en combi

Sin duda fue al nota de la semana, material suficiente de construcción de memes y una luz roja a la atención de la autoridad que ha sido omisa, invisible en asaltos comunes que ya han llegado al hartazgo de una sociedad que ha dejado de confiar en la autoridad vestida de policía; si bien es cierto que lo ocurrido en Texcoco no es el primer caso, han salido otros videos testimoniales de linchamientos contra ladrones y delincuentes en el momento en el que cometen o intentan asaltar a alguien, como lo que ocurrió la semana pasada en Juanacatlán donde un hombre había privado de la vida a un pequeño de 4 años y al cual lincharon vecinos del lugar propiciándole la muerte por la golpiza que le propinaron.

Un ladrón no sólo te roba tu patrimonio, tu celular, tu cartera, tu dinero, tu ropa a veces, se lleva con él tu tranquilidad y entre eso también tu identidad, tus datos personales, pierdas mucho más que lo material y aunque la policía llegue, detenga al presunto y uno lo identifique, el tema se complica aún más en la consignación; esto lo saben en las colonias donde la justicia por propia mano comienza a ganar terreno, incluso a veces la policía dice a los vecinos: si es ratero friégeselo.

El mensaje de Texcoco es claro y se aplica en todo el país; no hay seguridad en calles, colonias, negocios, casas y hasta en iglesias, hace una semana por ejemplo, en una capilla anexa al templo de Bugambilias a plena luz del día, unos sujetos cortando cartucho despojaron a los que se encontraban ahí de celulares, carteras, relojes y cuanto de valor tenían, con todo el tiempo y con toda impunidad, quienes vimos el video nos llenó de impotencia; más cuando la policía de Zapopan contesta en redes sociales que el video correspondía a hechos pasados y que la fiscalía trabajaba ya en la identificación de los presuntos responsables, respuesta que además indigna al interpretarse como una justificación sobre que ellos atienden el aquí y el ahora y lo pasado ya no corresponde a su responsabilidad. Cabe señalar que unos días antes de este asalto, en la misma plaza Bugambilias se suscitó un robo a un vehículo y que las mismas cámaras de videovigilancia captaron y donde la policía de Zapopan tampoco estaban en alerta. Ah por cierto, el vehículo en el que viajaban los asaltantes estaba polarizado, y eso ¿es infracción, violación al reglamento que no?

El enojo es compartido también por el actuar de la policía, los que en su encomienda está el proteger y servir, pero que ahora se ha convertido en intimidar y agredir, dejó de ser esa policía de proximidad, para convertirse, muchas veces en cómplices o peor aún en invisibles dejando a quienes son víctimas en la extrema indefensión. Queda claro que hoy el caso de la combi de Texcoco se ha convertido en el pretexto perfecto para la libertad de actuar en contra del delincuente porque de la autoridad no hemos escuchado nada, un compromiso o un mea culpa por las ausencias.

Ya vienen los tiempos electorales, y como siempre el tema de la seguridad será parte del discurso, pero víctimas ya somos, ahora toca saber cómo harán para realmente poner solución a esto que de día y de noche está en acecho, en esta ocasión los candidatos tendrán que realmente convencer con el plan o de lo contrario la gente viajará en combi para cobrarse lo que en la calle han pagado demasiado caro. Algo así como una antesala de ingobernabilidad pero justificada.


Sin duda fue al nota de la semana, material suficiente de construcción de memes y una luz roja a la atención de la autoridad que ha sido omisa, invisible en asaltos comunes que ya han llegado al hartazgo de una sociedad que ha dejado de confiar en la autoridad vestida de policía; si bien es cierto que lo ocurrido en Texcoco no es el primer caso, han salido otros videos testimoniales de linchamientos contra ladrones y delincuentes en el momento en el que cometen o intentan asaltar a alguien, como lo que ocurrió la semana pasada en Juanacatlán donde un hombre había privado de la vida a un pequeño de 4 años y al cual lincharon vecinos del lugar propiciándole la muerte por la golpiza que le propinaron.

Un ladrón no sólo te roba tu patrimonio, tu celular, tu cartera, tu dinero, tu ropa a veces, se lleva con él tu tranquilidad y entre eso también tu identidad, tus datos personales, pierdas mucho más que lo material y aunque la policía llegue, detenga al presunto y uno lo identifique, el tema se complica aún más en la consignación; esto lo saben en las colonias donde la justicia por propia mano comienza a ganar terreno, incluso a veces la policía dice a los vecinos: si es ratero friégeselo.

El mensaje de Texcoco es claro y se aplica en todo el país; no hay seguridad en calles, colonias, negocios, casas y hasta en iglesias, hace una semana por ejemplo, en una capilla anexa al templo de Bugambilias a plena luz del día, unos sujetos cortando cartucho despojaron a los que se encontraban ahí de celulares, carteras, relojes y cuanto de valor tenían, con todo el tiempo y con toda impunidad, quienes vimos el video nos llenó de impotencia; más cuando la policía de Zapopan contesta en redes sociales que el video correspondía a hechos pasados y que la fiscalía trabajaba ya en la identificación de los presuntos responsables, respuesta que además indigna al interpretarse como una justificación sobre que ellos atienden el aquí y el ahora y lo pasado ya no corresponde a su responsabilidad. Cabe señalar que unos días antes de este asalto, en la misma plaza Bugambilias se suscitó un robo a un vehículo y que las mismas cámaras de videovigilancia captaron y donde la policía de Zapopan tampoco estaban en alerta. Ah por cierto, el vehículo en el que viajaban los asaltantes estaba polarizado, y eso ¿es infracción, violación al reglamento que no?

El enojo es compartido también por el actuar de la policía, los que en su encomienda está el proteger y servir, pero que ahora se ha convertido en intimidar y agredir, dejó de ser esa policía de proximidad, para convertirse, muchas veces en cómplices o peor aún en invisibles dejando a quienes son víctimas en la extrema indefensión. Queda claro que hoy el caso de la combi de Texcoco se ha convertido en el pretexto perfecto para la libertad de actuar en contra del delincuente porque de la autoridad no hemos escuchado nada, un compromiso o un mea culpa por las ausencias.

Ya vienen los tiempos electorales, y como siempre el tema de la seguridad será parte del discurso, pero víctimas ya somos, ahora toca saber cómo harán para realmente poner solución a esto que de día y de noche está en acecho, en esta ocasión los candidatos tendrán que realmente convencer con el plan o de lo contrario la gente viajará en combi para cobrarse lo que en la calle han pagado demasiado caro. Algo así como una antesala de ingobernabilidad pero justificada.