/ jueves 3 de septiembre de 2020

Autopsia de un segundo informe

Lo escribí la semana pasada y pareciera que todo fue exactamente como la narrativa dictaba: un informe con datos propios, sin fuentes y un ejercicio de mañanera cualquiera; sin embargo hubo varios factores que marcaron el antes de este ejercicio. La primera de ellas la renuncia del Secretario de Semarnat que por cierto se hizo oficial apenas ayer, en donde ese ya emblemático sofá vuelve a aparecer en el sitio de las “renuncias”, la segunda y más devastadora fue la declaración del titular de Hacienda Arturo Herrera quien advirtió que el dinero que había en el país, pues simplemente se había terminado y que el 2021 será devastador en materia económica, una crisis no vista desde los años 30´s, otra más, la renuncia de Antonio Attolini a su cargo en el Instituto Nacional del seguro Social, y no al IMSS, en una carta donde ni firma había.

Otro aspecto que también se advirtió en el fin de semana fue la aparición de numerosas encuestas que fueron remitidas a grupos de WhatsApp, así como a diversas casas editoriales quienes en sus publicaciones advertían aprobaciones y desaprobaciones al gobierno de Andrés Manuel López Obrador pero sin dejar claro en realidad cuál es la radiografía del sentir del Mexicano frente al gobierno; personalmente nunca me han preguntado y tampoco he visto en la calle encuestadores.

La llegada del informe, el martes estuvo llena de adulaciones propias; que si el mismo López Obrador es el segundo mejor presidente, que si ha sido el mandatario más golpeado, que se han cumplido 95 de 100 compromisos… en fin, sigue justificando la herencia de administraciones con corruptelas pero no mencionó nada de los más recientes escándalos vertidos en video donde por cierto aparece su hermano y al respecto, de cara a la nación ni pío dijo.

Homicidios, robos, feminicidios, secuestros, la industria de la delincuencia también tuvo su momento, sobrio por cierto, destacando disminuciones en algunos rubros, pero al día siguiente, en Matamoros, un comando ejecuta a varias personas que estaban en un velorio, ¿mensaje claro o coincidencia fatal?.

Destacó la captura del Marro, pero no dio informe de Ovidio, no habló tampoco del alza de combustibles y volvió a arremeter contra adversarios y conservadores a quien no los suelta en sus discursos de todos los días.

En cuanto a salud, el silencio envolvió la ausencia en el discurso, en la agenda misma del presidente sobre los niños con cáncer, ese frente que está abierto y que parece no interesar cerrar o contribuir a resolver.

Sin embargo, la realidad que persigue al presidente fuera de las cuatro paredes de Palacio Nacional llegó puntual a la cita, protestas y manifestaciones que se escuchaban al aire durante la transmisión, gritos que sacaron de balance y concentración al presidente en más de una ocasión, fueron las voces que contrastaban con lo que decía, y que también en una cobertura informativa cuentan.

No hubo voces críticas, en las redes sociales abundaban los comentarios positivos, los vivas y las porras al presidente, eran tan rápido que imposibilitaba creer que quienes lo emitían realmente estuvieran poniendo atención a lo que se decía.

El presidente desmintió al secretario de Hacienda, envió un mensaje de que dinero hay y suficiente, que se ha dado a los pobres, a los necesitados, pero no reaccionando a lo que los indicadores económicos marcan antes de la pandemia, sólo habló de 150 mil empleos para recuperar del más del millón que se han perdido; un informe que no dio esperanza al mañana en un México que, nervioso opina de una administración que recién comienza.

El informe pues, había muerto el fin de semana, antes de presentar la versión de los propios datos y fue desde que la Secretaria de Hacienda y Crédito Público marcó el presente y futuro del país.

* Periodista

Lo escribí la semana pasada y pareciera que todo fue exactamente como la narrativa dictaba: un informe con datos propios, sin fuentes y un ejercicio de mañanera cualquiera; sin embargo hubo varios factores que marcaron el antes de este ejercicio. La primera de ellas la renuncia del Secretario de Semarnat que por cierto se hizo oficial apenas ayer, en donde ese ya emblemático sofá vuelve a aparecer en el sitio de las “renuncias”, la segunda y más devastadora fue la declaración del titular de Hacienda Arturo Herrera quien advirtió que el dinero que había en el país, pues simplemente se había terminado y que el 2021 será devastador en materia económica, una crisis no vista desde los años 30´s, otra más, la renuncia de Antonio Attolini a su cargo en el Instituto Nacional del seguro Social, y no al IMSS, en una carta donde ni firma había.

Otro aspecto que también se advirtió en el fin de semana fue la aparición de numerosas encuestas que fueron remitidas a grupos de WhatsApp, así como a diversas casas editoriales quienes en sus publicaciones advertían aprobaciones y desaprobaciones al gobierno de Andrés Manuel López Obrador pero sin dejar claro en realidad cuál es la radiografía del sentir del Mexicano frente al gobierno; personalmente nunca me han preguntado y tampoco he visto en la calle encuestadores.

La llegada del informe, el martes estuvo llena de adulaciones propias; que si el mismo López Obrador es el segundo mejor presidente, que si ha sido el mandatario más golpeado, que se han cumplido 95 de 100 compromisos… en fin, sigue justificando la herencia de administraciones con corruptelas pero no mencionó nada de los más recientes escándalos vertidos en video donde por cierto aparece su hermano y al respecto, de cara a la nación ni pío dijo.

Homicidios, robos, feminicidios, secuestros, la industria de la delincuencia también tuvo su momento, sobrio por cierto, destacando disminuciones en algunos rubros, pero al día siguiente, en Matamoros, un comando ejecuta a varias personas que estaban en un velorio, ¿mensaje claro o coincidencia fatal?.

Destacó la captura del Marro, pero no dio informe de Ovidio, no habló tampoco del alza de combustibles y volvió a arremeter contra adversarios y conservadores a quien no los suelta en sus discursos de todos los días.

En cuanto a salud, el silencio envolvió la ausencia en el discurso, en la agenda misma del presidente sobre los niños con cáncer, ese frente que está abierto y que parece no interesar cerrar o contribuir a resolver.

Sin embargo, la realidad que persigue al presidente fuera de las cuatro paredes de Palacio Nacional llegó puntual a la cita, protestas y manifestaciones que se escuchaban al aire durante la transmisión, gritos que sacaron de balance y concentración al presidente en más de una ocasión, fueron las voces que contrastaban con lo que decía, y que también en una cobertura informativa cuentan.

No hubo voces críticas, en las redes sociales abundaban los comentarios positivos, los vivas y las porras al presidente, eran tan rápido que imposibilitaba creer que quienes lo emitían realmente estuvieran poniendo atención a lo que se decía.

El presidente desmintió al secretario de Hacienda, envió un mensaje de que dinero hay y suficiente, que se ha dado a los pobres, a los necesitados, pero no reaccionando a lo que los indicadores económicos marcan antes de la pandemia, sólo habló de 150 mil empleos para recuperar del más del millón que se han perdido; un informe que no dio esperanza al mañana en un México que, nervioso opina de una administración que recién comienza.

El informe pues, había muerto el fin de semana, antes de presentar la versión de los propios datos y fue desde que la Secretaria de Hacienda y Crédito Público marcó el presente y futuro del país.

* Periodista