/ martes 19 de marzo de 2019

A protegernos

José Roque Albín Huerta*


Los meses de marzo y abril de 2019, representan un alto contenido en coincidencias respecto a su cronograma; a saber:

La Cuaresma es celebrada por toda la cristiandad, por los católicos, los católicos ortodoxos, y algunas ramas del protestantismo, como los anglicanos y algunas iglesias evangélicas, da inicio el miércoles 06 de marzo y concluye el 18 de abril de este mismo año.

La primavera es una de las cuatro estaciones del año que ya conocemos y que, inicia con el equinoccio, que se define como el momento del año en que el día y la noche tienen la misma duración debido a que el Sol se encuentra sobre el Ecuador del planeta Tierra, su palabra y traducción como tal, proviene del latín “aequinnoctium” que significa “noche igual”, en este año, dará inicio el miércoles 20 de marzo y concluye el viernes 21 de junio, según nuestro calendario.

Esta estación, se caracteriza porque los días son más largos que las noches, aunado a ello, los árboles y los campos vuelven a florecer, es bueno comentar que su inicio y culminación nunca suceden en la misma fecha, tomando en consideración que nuestro calendario ajusta un día cada cuatro años, o sea, el llamado año bisiesto para compensar cada ciclo de 365.25 que se refiere a la duración exacta de la Tierra alrededor del Sol.

El también llamado astro rey, es el centro del sistema solar en el que se encuentra la Tierra, su función física principal, es de proveer luz, calor y energía a todos los seres vivos, desde luego que se considera como el motor y la existencia en el planeta de la vida y el generador de los climas en otros planetas.

Dentro del periodo comprendido del 15 al 26 de abril, se encuentra el inicio vacacional principalmente escolar, según lo acordado por la Secretaría de Educación Pública (SEP), fecha coincidente con la Semana Santa y Pascua, tiempo propicio para permanecer un tiempo más con la familia, ya descansando en casa o visitando algún destino turístico, sea en la sierra o playa.

A propósito de esta temporada, existen estudios científicos que sostienen el daño que el Sol causa al ácido desoxirribonucleico (ADN), hasta en la sombra, ya que sus efectos de la radiación ultravioleta en la piel muestran su daño, aunque su exposición esté en la más completa oscuridad, esto provocado por los tipos de ondas en el espectro electromagnético, estos tipos de ondas, no todas son iguales, por ejemplo; las ondas infrarrojas tienen menos energía que las ondas de luz visible, las ondas infrarrojas son más largas, con más espacio entre cada subida y bajada, a diferencia de las ondas ultravioletas que tienen más energía que la luz visible, es precisamente esta energía la que nos puede dañar.

A manera de prevención, se puede proteger la piel haciendo algo que inhiba que los rayos ultravioletas te alcancen, él uso de la ropa, sombreros y las sombrillas, agregando unos lentes con cristal polarizado, son una excelente forma de mantener alejadas esas ondas, desde luego que el uso del bloqueador es bueno porque contiene sustancias químicas que pueden reflejar o absorber la luz ultravioleta, manteniendo tu piel libre de quemaduras del sol, de esa manera puedes disfrutar de la otra energía del sol, la luz visible y el calor infrarrojo.

Por último, el albinismo se define como un trastorno genético heterogéneo, causado en diferentes genes, que produce una reducción o ausencia total de pigmento de la melanina (se halla en la mayor parte de los seres vivos) de ojos, piel y pelo…es hereditario, aparece con la combinación de los dos padres portadores del gen regresivo. Es preciso mencionar que para las personas llamadas albinos, no pueden, ni deben exponerse al sol bajo ninguna circunstancia.

Así, amigo lector, viene la época de vacaciones de Semana Santa y Pascua, de convivir y disfrutar con nuestros familiares, de un merecido descanso, solo no hay que olvidarnos de proteger y protegernos, gracias por todo, saludos.

Rector General del Centro Universitario UTEG*

Email. joseroque@uteg.edu.mx

José Roque Albín Huerta*


Los meses de marzo y abril de 2019, representan un alto contenido en coincidencias respecto a su cronograma; a saber:

La Cuaresma es celebrada por toda la cristiandad, por los católicos, los católicos ortodoxos, y algunas ramas del protestantismo, como los anglicanos y algunas iglesias evangélicas, da inicio el miércoles 06 de marzo y concluye el 18 de abril de este mismo año.

La primavera es una de las cuatro estaciones del año que ya conocemos y que, inicia con el equinoccio, que se define como el momento del año en que el día y la noche tienen la misma duración debido a que el Sol se encuentra sobre el Ecuador del planeta Tierra, su palabra y traducción como tal, proviene del latín “aequinnoctium” que significa “noche igual”, en este año, dará inicio el miércoles 20 de marzo y concluye el viernes 21 de junio, según nuestro calendario.

Esta estación, se caracteriza porque los días son más largos que las noches, aunado a ello, los árboles y los campos vuelven a florecer, es bueno comentar que su inicio y culminación nunca suceden en la misma fecha, tomando en consideración que nuestro calendario ajusta un día cada cuatro años, o sea, el llamado año bisiesto para compensar cada ciclo de 365.25 que se refiere a la duración exacta de la Tierra alrededor del Sol.

El también llamado astro rey, es el centro del sistema solar en el que se encuentra la Tierra, su función física principal, es de proveer luz, calor y energía a todos los seres vivos, desde luego que se considera como el motor y la existencia en el planeta de la vida y el generador de los climas en otros planetas.

Dentro del periodo comprendido del 15 al 26 de abril, se encuentra el inicio vacacional principalmente escolar, según lo acordado por la Secretaría de Educación Pública (SEP), fecha coincidente con la Semana Santa y Pascua, tiempo propicio para permanecer un tiempo más con la familia, ya descansando en casa o visitando algún destino turístico, sea en la sierra o playa.

A propósito de esta temporada, existen estudios científicos que sostienen el daño que el Sol causa al ácido desoxirribonucleico (ADN), hasta en la sombra, ya que sus efectos de la radiación ultravioleta en la piel muestran su daño, aunque su exposición esté en la más completa oscuridad, esto provocado por los tipos de ondas en el espectro electromagnético, estos tipos de ondas, no todas son iguales, por ejemplo; las ondas infrarrojas tienen menos energía que las ondas de luz visible, las ondas infrarrojas son más largas, con más espacio entre cada subida y bajada, a diferencia de las ondas ultravioletas que tienen más energía que la luz visible, es precisamente esta energía la que nos puede dañar.

A manera de prevención, se puede proteger la piel haciendo algo que inhiba que los rayos ultravioletas te alcancen, él uso de la ropa, sombreros y las sombrillas, agregando unos lentes con cristal polarizado, son una excelente forma de mantener alejadas esas ondas, desde luego que el uso del bloqueador es bueno porque contiene sustancias químicas que pueden reflejar o absorber la luz ultravioleta, manteniendo tu piel libre de quemaduras del sol, de esa manera puedes disfrutar de la otra energía del sol, la luz visible y el calor infrarrojo.

Por último, el albinismo se define como un trastorno genético heterogéneo, causado en diferentes genes, que produce una reducción o ausencia total de pigmento de la melanina (se halla en la mayor parte de los seres vivos) de ojos, piel y pelo…es hereditario, aparece con la combinación de los dos padres portadores del gen regresivo. Es preciso mencionar que para las personas llamadas albinos, no pueden, ni deben exponerse al sol bajo ninguna circunstancia.

Así, amigo lector, viene la época de vacaciones de Semana Santa y Pascua, de convivir y disfrutar con nuestros familiares, de un merecido descanso, solo no hay que olvidarnos de proteger y protegernos, gracias por todo, saludos.

Rector General del Centro Universitario UTEG*

Email. joseroque@uteg.edu.mx

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